videojuegos

Análisis 'Durango'

  • Dinosaurios y supervivencia en una producción en línea para dispositivos móviles.

Que la industria del videojuego sabe adaptarse a las nuevas tecnologías es un hecho consensuado. El lanzamiento del primer iPhone, aunque se remonta a hace una década exactamente, abrió el camino a las aplicaciones de entretenimiento digital en dispositivos inteligentes. De hecho, los cambios han sido tan profundos, que incluso veteranas de la industria han dado el salto a este nuevo mercado: The Pokemon Company arrasa con su fenómeno Pokémon Go y, poco después, Nintendo ha repetido éxito con Super Mario Run. ¿Quién iba a pensar que, algún día, aparecería el bigotudo fontanero en una plataforma sin el sello de Nintendo?

En cualquier caso, los estudios continúan ofreciendo un amplio abanico de experiencias para mantener a los usuarios más conectados. Una de las propuestas más interesantes de cara a este 2017 es‘Durango, una producción que actualmente se encuentra en fase beta y que promete un estilo de juego que poco o nada tiene que envidiar a propuestas teóricamente más grandes. En resumen, Durango ofrece un desconocido mundo infestado de dinosaurios y un sistema de artesanía y lucha por la supervivencia que logra mantener al jugador en vilo. Y todo esto, en la palma de la mano.

Año desconocido. Isla inexplorada.

Durango comienza de forma trepidante. Nada más iniciar la aventura el jugador se ve obligado que escoger entre uno de los 16 pasajeros de un tren. Cada uno de ellos tiene una historia de fondo y unos atributos específicos. Por ejemplo, encontramos a una pareja de estudiantes, varias personas que van en busca de un trabajo, algunos soldados… La selección es importante, ya que marca la primera decisión de nuestro personaje. Poco después de escoger avatar comenzará la aventura: los pasajeros desaparecen, varios dinosaurios entran en escena y, contra todo pronóstico, aparecemos en una isla inexplorada en la cual hay que sobrevivir. Este es el punto de partida.

A partir de aquí, y con un proceso guiado por los líderes de la isla, el jugador aprende las mecánicas básicas de supervivencia. Recolectar objetos, talar árboles, obtener recursos, combinarlos para crear utensilios y armas nuevas son algunas de las premisas básicas de la obra. La primera misión, de hecho, pasa por buscar los materiales necesarios para finiquitar una balsa destinada a escapar de la isla, combinando madera y piedra para crear un machete y jugando con el entorno para encontrar los ingredientes adecuados.

Hasta aquí parece que el videojuego es una propuesta más dentro de las típicas mecánicas de supervivencia. Sin embargo, Durango requiere de conexión a Internet constantemente, ya que la obra propone reunir a tantos jugadores como sea necesario para que la supervivencia sea colectiva. Sí, el título está basado en la comunidad y veremos cómo los demás jugadores recolectan y luchan en todo momento, permitiendo tanto escribir mediante texto como grabar notas de audio para comunicarnos con los demás jugadores.

La comunidad, por tanto, se vuelve imprescindible. No sólo hay que mantener altos los niveles de comida, aseo y agua de nuestro personaje, sino que, al caer la noche, los peligros se acentúan y tendremos que estar preparados para combatir contra los dinosaurios. Las mecánicas de combate son simples, con un botón para atacar y otro para esquivar en una suerte de lucha por turnos dinámica. Y, por si fuera poco, el título incluye un sistema de progresión por niveles que va abriendo nuevas posibilidades tanto en ataque, defensa y creación de objetos.

Además, el videojuego hace gala de unos gráficos muy decentes, tanto en animaciones como en calidad, con algunas secuencias de vídeo generadas por ordenador que sorprenden en la pantalla del teléfono móvil. Por su parte, el diseño de los personajes, más allá de sus modelados tridimensionales, es bastante actual y convence en todo momento.

Aunque se encuentra en estado beta, la producción de Nexon promete ir intensificándose con el tiempo gracias a la interacción de los usuarios, la creación de clanes de supervivencia y, por supuesto, la introducción de nuevo contenido por parte del estudio. Actualmente no está disponible para el gran público, sino que sólo se puede acceder mediante un código para controlar el flujo de jugadores y perfilar las mecánicas de cara a un lanzamiento final.

Como adelantábamos, la obra recoge ingredientes muy interesantes y los traslada con maestría a la pantalla del smartphone ofreciendo una experiencia muy adictiva. De cara al lanzamiento, lo único que podemos pedirle al estudio es que traduzca los textos a nuestro idioma para que los jugadores españoles no tengan demasiados impedimentos en formar una comunidad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios