historia de iván fandiño en la maestranza

'El Peñón de Orduña' junto a la Giralda

  • Debutó el 13 de abril de 2010 con una corrida de Palha

  • En 2012 cortó una oreja a un 'victorino'

Tras su paso como pelotari, Iván Fandiño (Orduña, 29 de septiembre de 1980-Mont de Marsan, 17 de junio de 2017) se aficionó a los toros.

En estos tiempos en los que los noveles aprenden las primeras letras del toreo en escuelas taurinas, sus comienzos fueron atípicos. Tan atípicos que el torero vasco se forjó a la vieja usanza, en la extrema dureza de las capeas de los pueblos; en concreto de Guadalajara, donde se enfrentó a numerosos toros fieros y peligrosos con un corazón inmenso y unas agallas fuera de lo común que le revistieron como un torero de raza.

No es extraño, por tanto, que su debut en Sevilla, donde sumó nueve festejos como matador de toros, tuviera lugar con una corrida de las denominadas duras, con las que se batió el cobre a lo largo de su carrera. Nada más y nada menos que la temida ganadería portuguesa de Palha -su lema es Terror, furor y pavor-. Sucedía el 13 de abril de 2010 y los aficionados sevillanos se encontraron con un torero de 29 años de edad, que había cumplido un lustro de alternativa. Fue una actuación digna ante un lote complicado, en la que apuntó un valor sereno y en la que se jugó la vida sin cuento alguno ante un peligrosísimo sexto, que en uno de los hachazos que le lanzó estuvo a punto de enviarle a la enfermería. Se ganó un puesto para la Feria de Abril de 2011, en la que dejó la impronta de un toreo serio en la corrida de Conde de la Maza.

En 2012 hizo doblete en el serial abrileño, al que llegaba tras salir a hombros en Fallas y ascendiendo peldaños en su carrera. Hizo doblete. En la corrida de El Ventorrillo no tuvo opciones al lucimiento y en la de Victorino Martín cortó una oreja tras una actuación importante.

Después de este éxito, la empresa Pagés no le contrató para 2013, el año en el que se convirtió en el diestro que más toros lidió en plazas de primera categoría -sumando 18 festejos en los que consiguió 20 trofeos-. De escenarios de primer nivel, únicamente no toreó en la Maestranza. Esa temporada fue premiado como el torero más destacado junto a El Juli.

En 2014 retornó e hizo doblete en el abono, con Jandilla y Victorino Martín, pero no se cumplieron sus expectativas. Y en la última temporada en la que apareció en Sevilla, en 2015, se enfrentó a un lote aplomado de Torrestrella y a otro complicado de Miura.

Independientemente de trofeos y premios conseguidos, en todas esas actuaciones nos encontramos con un profesional a carta cabal, con raza, que siempre buscó la pureza. De todas ellas, me viene ahora a la memoria del corazón una que definió su toreo en la tarde del 24 de abril de 2012 que titulé "El Peñón de Orduña, pétreo ante victorinos" y en la que consiguió el único trofeo de la tarde en un mano a mano con David Mora y cuya crónica cerraba diciendo: "Como lectura muy positiva, la firmeza de ese Peñón de Orduña, duro, pétreo, que ha crecido sin que el viento de las corridas duras haya erosionado ese toreo de verdad y pureza que siempre busca. Un peñón de luces vasco, que ayer emergió con fuerza ante victorinos en la Maestranza". Ese Peñon de Orduña al que vimos y de cuyo toreo disfrutamos junto a la Giralda, en la plaza de toros de Sevilla.

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