Las víctimas que rompieron el silencio para denunciar los abusos sexuales y el acoso fueron distinguidas ayer por la revista Time con el título de Persona del Año 2017.

The silence breakers (Los rompedores del silencio) se lee en la portada más esperada del año del semanario estadounidense sobre una foto de cinco de las mujeres que denunciaron públicamente abusos sexuales y acoso, entre ellas la cantante Taylor Swift y la actriz Ashley Judd.

Se trata de las inspiradoras e inspiradores, porque también hay hombres entre estas voces, que luego se convirtió en el movimiento #MeToo, que denunció en las redes sociales los abusos y está haciendo temblar al mundo de la política, las artes, la empresa y los medios de comunicación.

"Las personas que han roto su silencio sobre el abuso sexual y el acoso abarcan todas las razas, todas las clases económicas, todas las ocupaciones y, virtualmente, todas las esquinas del mundo", señaló el semanario.

El editor de Time, Edward Felsenthal, destacó el gran impacto social de este movimiento espontáneo, que carece de líderes. Sus acciones, indicó, "han desencadenado uno de los giros más rápidos en nuestra cultura desde la década de 1960. Los medios sociales actuaron como un acelerante poderoso".

El movimiento ha propiciado el despido y la dimisión de muchos hombres. De hecho, el martes, dimitía el congresista más veterano en EEUU después de que varias mujeres que formaron parte de su equipo lo acusaran públicamente de acoso sexual.