Sociedad

La Iglesia pedirá la abolición del aborto

  • La petición tendrá lugar hoy en la VII Jornada Nacional por la Vida que organiza la Iglesia española.

La Conferencia Episcopal Española (CEE) pedirá hoy la abolición del aborto con motivo de la VII Jornada Nacional por la Vida que celebra la Iglesia española, coincidiendo con la solemnidad litúrgica de la Encarnación.

En una nota de la CEE de la Subcomisión Episcopal de Familia y Vida, presidida por monseñor Juan Antonio Reig Pla, los obispos reconocen su "deber" de "promover en la Iglesia y en la sociedad el valor de la vida humana" apoyando las iniciativas que se dirijan en este sentido. Citan, en concreto, la moratoria internacional sobre el aborto. Además, algunos obispos han dedicado sus cartas semanales a este tema.

Los prelados denuncian "ciertas prácticas abortivas" y "la crueldad de los medios utilizados para ocultarlas" y, tras considerar el cese del aborto ilegal "como un gran avance", piden la abolición de la ley del aborto, a la que consideran "injusta".

A cambio, proponen medidas alternativas como acrecentar el apoyo económico y social a la mujer y la promoción de las adopciones. "Miles de esposos tienen que acudir a largos y gravosos procesos de adopción mientras en España más de cien mil niños murieron por el aborto durante el año 2006", apuntan.

Los obispos recuerdan a los católicos sus "obligaciones morales y de conciencia" y les advierten de que "no pueden admitir en ningún caso prácticas como el aborto, la eutanasia o la producción, congelación y manipulación de embriones humanos".

Por todo ello, animan a los fieles a movilizarse "para afrontar los múltiples ataques a que está expuesto el derecho a la vida" y a "informarse" de las razones por las que la Iglesia sostiene "el valor y la dignidad de la vida personal desde la fecundación hasta la muerte natural".

Por su parte, el obispo de Almería, monseñor Adolfo González Montes, pide a "los legisladores católicos" que sean "fieles" a su conciencia moral. En su carta semanal, titulada 'Se hizo carne', les recuerda "el deber de hacer cuanto esté a su alcance para garantizar la protección del embrión, oponiéndose a este tipo de leyes antihumanistas". Entre ellas, cita la ley sobre células madre, "lesiva a la dignidad humana". González Montes achaca la "brutal plaga" de abortos en España al "plan laico de supuesta educación sexual".

El obispo de Córdoba, monseñor Juan José Asenjo, también en su carta semanal, titulada 'Defender la vida siempre', manifiesta que "el progreso y la libertad de la mujer" no pueden servir de "excusa" para el aborto, como tampoco "su carácter legal", ya que, según subrayó, "no todo lo que es legal es moral".

Asenjo recordó las palabras que, sobre el aborto, pronunció en 1982 el Papa Juan Pablo II durante su primera visita a España: "Quien negara la defensa de la persona humana más inocente y débil, de la persona humana ya concebida aunque todavía no nacida, cometería una gravísima violación del orden moral. Nunca se puede legitimar la muerte de un inocente. Se minaría el mismo fundamento de la sociedad".

Finalmente, se dirigió a los sacerdotes, catequistas, profesores de Religión y responsables de grupos y movimientos apostólicos, para que "se impliquen en esta Jornada y recuerden a todos que el derecho a la vida es el primer derecho fundamental", por lo que abogó para que "llegue el día en que el aborto sea suprimido de nuestras leyes y todos reconozcamos el inmenso y trágico error cometido en los siglos XX y XXI por la Humanidad".

En la misma línea se mostró el delegado de Pastoral Familiar de la archidiócesis de Madrid, Manuel Barrios, que instó a los católicos a "hacer todo lo posible" para "defender y proclamar el valor de la sagrado de toda vida humana, desde la fecundación hasta su muerte natural".

Barrios señaló que los datos que se conocen sobre el aborto en España son "escalofriantes" y recordó que en 2006 "se realizaron más de 100.000 abortos en España y más de 22.000 en la Comunidad de Madrid". También hizo alusión a las noticias sobre la práctica abortiva en algunas clínicas, que "nos hace a todos más conscientes del crimen nefando que todo esto supone".

Apuntó, además, que son muchas las mujeres inmigrantes, y muy jóvenes, que abortan, una situación que solicita "una acción eclesial más decidida".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios