Semana Santa

Un museo cargado de Esperanza

  • La Hermandad de San Francisco completa las dependencias de su sede con un espacio que acoge las piezas de su patrimonio

  • El recorrido incluye la visita al camarín de la Virgen

La Hermandad de la Esperanza vuelve a sorprendernos dando un paso más en su iglesia y casa de hermandad. Aquel proyecto que comenzara en 1978 con una sencilla iglesia, viene ahora a completarse con las mejoras en nuevas dependencias.

Si recientemente fue la bendición del retablo para el Cristo de la Expiración, el 7 de diciembre del pasado año, ahora es el Museo de la hermandad.

El retablo fue bendecido por el obispo de Huelva, José Vilaplana Blasco, y conforma un magnífico calvario en el que el Cristo de la Expiración aparece acompañado por la Virgen del Mayor Dolor y San Juan Evangelista. A los pies se encuentra el sagrario, un espacio íntimo de capilla sacramental donde también se expone la artística custodia procesional para el Corpus, con el Niño Jesús. La Virgen de la Esperanza lo preside todo y desde su mirada accedemos hasta el Museo Esplendores de Esperanza, que inaugurado el pasado Miércoles de Ceniza por el párroco de Estrella del Mar, Baldomero Rodríguez Carrasco, se recorre en tres espacios.

El nombre Esplendores de Esperanza, con el que se conoce el Museo de la Hermandad de San Francisco, lo toma de la exposición que tuvo lugar en la Casa Colón de Huelva con motivo de la coronación canónica de la Virgen de la Esperanza. Una exposición que fue visitada por los Reyes de España don Juan Carlos I y doña Sofía.

El museo alberga las preseas y objetos más valiosos de la hermandad. Podrá ser visitable por todas las personas que lo deseen y en el mismo se podrán contemplar, entre otros enseres y preseas, la corona de Nuestra Señora de la Esperanza o las potencias del Cristo de la Expiración.

El Museo Esplendores de Esperanza consta de tres espacios dentro de la casa de la hermandad. Los enseres están expuestos en grandes vitrinas realizadas en madera con cristales blindados de seguridad y fondo de telas de damasco burdeos. Para dar mayor realce a todos los enseres ubicados en estas salas se dispone de un sistema de iluminación especializado para este tipo de espacios.

La planta baja está dedicada al paso del palio de Nuestra Señora de la Esperanza y a sus preseas más destacadas, como es la corona de su coronación canónica. Mientras, se puede contemplar en una gran cristalera el manto procesional. Un espacio para recrearse en todos los detalles de bordados y orfebrería, además de insignias tan destacadas como el Simpecado inmaculista o el guión de la ciudad de Huelva.

En la segunda planta se encuentran otros enseres de la Virgen de la Esperanza y del Cristo de la Expiración y María Santísima del Mayor Dolor. Se exponen sayas, toca de sobremanto, cinturillas y elementos de orfebrería.

Un último espacio expositivo es el del camarín de la Virgen de la Esperanza, especialmente recogido y hermoso, con todas las preseas y lo más importante, la cercanía que ofrece, ya que desde aquí casi se toca a la Esperanza.

Igualmente la zona del coro se ha habilitado con vitrinas expositivas para toda la cuestión litúrgica, como casullas.

Alfonso Díaz Aragón, hermano mayor de la Hermandad de la Esperanza, señala que este museo "es un paso muy importante en la vida de la hermandad, porque vamos cumpliendo proyectos muy ilusionantes; nos va a permitir poder enseñar el patrimonio de la hermandad, no sólo a los hermanos, sino a todo el que lo desee". Quedará sólo pendiente culminar el retablo de la Virgen, para ello habrá que esperar unos cuatro años.

El museo se podrá visitar hasta el 4 de marzo, ya que será entonces cuando se proceda al montaje de los pasos y a la utilización de los enseres del museo.

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