Los trabajos arqueológicos realizados en las antiguas ruinas del castillo de Aracena permiten la recuperación y consolidación de la cerca exterior de la muralla. El proyecto de estudio de la fortaleza construida en el siglo XII es a través del Plan de Arquitectura Defensiva de Andalucía, que subvenciona la Consejería de Cultura con un presupuesto inicial de 60.000 euros.

Las investigaciones llevadas a cabo por los arqueólogos del proyecto ha provocado la recopilación de toda la información existente en los Archivos Históricos de Madrid y Sevilla sobre la última restauración en la muralla durante la década de los setenta del siglo pasado.

El delegado de Cultura, Juan José Oña, y el alcalde de Aracena, Manuel Guerra, visitaron recientemente las excavaciones para comprobar el estado de los trabajos en la histórica fortaleza con fines defensivos y estratégicos de la localidad. Las obras en la muralla están evitando el deterioro progresivo de los últimos años y a su vez una mayor anchura del camino alrededor del castillo.

Además, el proyecto también abarca la investigación arqueológica en el interior del castillo con el fin de dibujar las plantas de la fortaleza, sus conexiones entre sí y así arrojar luz de cómo era la estructura del mismo.

Las excavaciones siguen el patrón marcado por las prospecciones geofísicas. De ahí la elaboración de un mapa del subsuelo para conocer el trazado de las murallas. También ha sido necesario un estudio para determinar la fábrica y materiales de las diferentes estructuras arquitectónicas con el objetivo de conocer sus características constructivas.

El encargado de tutelar por el mantenimiento del patrimonio histórico es el arqueólogo local Eduardo Romero Bomba. Con este proyecto se permite recuperar uno de los lugares más emblemáticos para los aracenenses desde el punto de vista arqueológico y fomentar uno de los mayores activos turísticos de Aracena.