El alcalde de Aljaraque, el socialista José Martín, descartó ayer que existan más terrenos contaminados más allá de las parcelas de los planes parciales residencias 9 y 12 en los que Medio Ambiente confirmó la presencia de metales pesados en elevadas concentraciones y señaló que, en cualquier caso, si hay algún viso de mas afección de terrenos, corresponde a la Junta determinarlo. "Yo no tengo temor por el resto de Corrales", zona en la que aseguró se realizan controles "constantes" de las aguas para garantizar su estado.

Con una denuncia ya en curso de varios propietarios de viviendas afectados por la contaminación de los terrenos, Martín deja en manos de los tribunales la depuración de las posibles responsabilidades que pudieran derivarse del caso (la Fiscalía pidió hace ya dos semanas que los juzgados investigaran una posible estafa). "Si ha habido irregularidades en etapas pasadas, no corresponde decirlo al Ayuntamiento sino a la Justicia", con la que garantizó colaboración, poniendo a su disposición "toda la documentación de la que se dispone en el Consistorio" si llegara el caso.

Tras recordar que no participó en las decisiones municipales que se tomaron en anteriores mandatos (al no estar en el Ayuntamiento), incluida la licencia de obras para la primera urbanización del PPR9, el alcalde indicó que, sin embargo, "nos sentimos responsables y nos toca el análisis de los pasos que se han ido dando y comprobar si hay algún tipo de responsabilidad". En este sentido, indicó que el Consistorio ya encargó un informe que concluye que en este proceso "no habría incurrido en ninguna irregularidad manifiesta". Aún así, concretó que está a la espera de un segundo informe que tendrá que evacuar la Secretaría municipal y que de momento no tiene fecha, e insistió en que "estamos abiertos a ofrecer cualquier información que la Justicia requiera del Ayuntamiento".

El regidor afirmó que no concederá licencia de ocupación ni de ningún otro tipo en tanto Medio Ambiente no concluya los trabajos de descontaminación en los terrenos directamente afectados por la presencia de metales pesados.

Martín quiso lanzar un mensaje de tranquilidad y afirmó que si bien la contaminación por la actividad minera es "evidente" en los puntos en los que se concentraba el machaqueo de la pirita, se trata de un suelo que "es recuperable con todas las garantías que no tiene que ser estigmatizado".