La Junta de Andalucía ha tardado solamente dos días en realizar una labor de inspección en las presas mineras de Riotinto después de que este periódico se hiciera eco de las denuncias ecologistas sobre filtración de aguas ácidas desde La Aguzadera al arroyo Tintillo y al río Odiel.

Emed Tartessus ha confirmado, a través de una nota enviada a esta Redacción, que un inspector de la Administración andaluza se personó ayer en las instalaciones y en su acta recoge que "tanto las bombas de trasvase entre las presas como las de bombeo de filtraciones se encuentran funcionando a pleno rendimiento, filtraciones que se devuelven a la presa, recirculándolas, sin que se observen vertidos a cauce público".

El acta, siempre según el comunicado de la empresa, recoge además que el "canal perimetral se encuentra limpio y el fusible de Gossan al canal cerrado". Y ha agradecido "a la Junta de Andalucía y a la delegación de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, la celeridad con la que se ha procedido a la inspección ante las alarmantes e infundadas denuncias".

Según la empresa minera propietaria de gran parte de las minas de Riotinto, "esta actuación demuestra que la empresa EMED Tartessus no ha negado nunca el acceso a cuantos técnicos, inspectores o auditores soliciten el acceso a la misma. Las únicas negativas, avaladas por sentencia judicial, son referentes a la entrada de personal ajeno a la empresa para trabajar en las instalaciones".

En su nota, EMED Tartessus subraya que "siguiendo sus criterios fundacionales, que ha llevado a su empresa matriz a recibir premios internacionales medioambientales de minería, está dispuesta a corregir y atender las indicaciones de la Junta en cualquier sentido y ofrece transparencia a los medios de comunicación que quieran recabar información o visitar la mina y todas sus instalaciones. En todo caso, estima que no se pueden confundir ni mezclar informes o situaciones pasadas con el presente". La firma "garantiza que, mientras permanezca como propietaria de las instalaciones, se cumplirán las normas de seguridad y de respeto al medioambiente". Y apunta una reflexión "para que no se produzcan informaciones que puedan crear una alarma social innecesaria, basada en datos o informaciones" que considera falsas.