Trabajadores de la antigua compañía minera de Tharsis se concentraron ayer en la Delegación de Empleo para denunciar el incumplimiento del acuerdo suscrito en 2002 con la Junta de Andalucía que contemplaba la recolocación de los ex mineros tras el cese de actividad de la mina.

El centenar de ex mineros han solicitado al delegado provincial, Juan Márquez, una reunión para abordar el futuro laboral del colectivo una vez que concluya el contrato de empleo que continúa el vigor.

Los trabajadores han mostrado su preocupación por la situación en que se encuentran después de que hayan transcurrido varios años desde el cierre de la mina y aún no hayan sido recolocados como se acordó, después que una parte de los mineros excedentes de la antigua compañía se acogieron al plan de prejubilaciones.

Hasta el momento el resto de los mineros han venido realizando trabajos en la empresa pública Egmasa, consistentes en la restauración de zonas mineras degradadas y su adaptación para actividades de carácter turístico o de ocio. Junto a estas tareas los ex mineros realizan cursos de formación.

Según han explicado los trabajadores, éstos tienen establecido anualmente un contrato laboral durante doce meses, de los cuales cuatro corresponde a las labores de formación, sin que hasta el momento haya permitido su integración laboral en proyectos industriales que se han desarrollado en la Cuenca Minera, como es el caso de las plantas de Tharsis, Nerva (vertedero) o la propia Aguas Teñidas.

Los ex mineros consideran que su futuro laboral continúa en el aire, sobre todo después que la finalización del último contrato esté llegando a su fin y Egmasa todavía no les haya comunicado si la relación contractual se renovará o si quedará extinguida.

Ante esta circunstancia los ex mineros han solicitado una entrevista con el responsable provincial de Empleo que mantendrán, inicialmente la próxima semana, como al parecer se han comprometido desde la delegación. Los trabajadores se consideran un tanto marginados por la Administración de ahí que soliciten que puedan acogerse también a una plan de prejubilaciones, "si somos un problema y no saben dónde colocarnos", como sucedió cuando se produjo la crisis de la mina.

Es más, plantean como solución las prejubilaciones teniendo en cuanto que la mayoría de ellos alcanza ya prácticamente los cincuenta año de edad, por lo que estarían ya en condiciones de optar a esta alternativa.

Este colectivo de trabajadores ha denunciado en reiteradas ocasiones el incumplimiento de los acuerdos firmados y reclaman una solución definitiva y estable a su situación.

Los trabajadores entienden que después del periplo por el que han pasado la Administración tiene que ofrecerles una alternativa de empleo al menos a medio plazo después que la vía de incentivos a la contratación indefinida en la llamada Zona de Acción Especial o a través de la Mesa de la Diversificación Industrial hayan fracasado y los nuevos proyectos industriales en la Cuenca Minera hayan sido escasos.

Tras el cierre de la minas de Tharsis un centenar de ex mineros se beneficiaron de varias acciones formativas con la finalidad de posibilitar la contratación de estas personas en los nuevos proyectos a implantar en la zona. Se trata de cursos becados, donde se les da una ayuda que complementa su renta con las prestaciones por desempleo que vienen recibiendo. Inicialmente, la formación se realiza en base a las actividades que surgen en la zona que se incluyen dentro de un plan.

La minería ha sido el sustento económicos de la zona tharsieña con más de mil empleo directos que se perdieron años atrás junto a otro número de puestos de trabajo indirectos. Al igual que ocurrió en otras zonas de la Cuenca Minera la crisis de finales de los años noventa afectó a las explotaciones milenarias de Tharsis. Sin embargo pasado unos años, la actividad minera ha vuelto a resurgir en otras zonas, a tenor de la reapertura de la mina de Aguas de Teñidas, y el proyecto de la antigua MRT. La zona alosnera se ha quedado fuera de juego.