La Denominación de Origen Vinos y Vinagres Condado de Huelva culminará este año un mapa de su superficie y llevará a cabo un control que permitirá saber los cuidados que necesitan las plantaciones en tiempo real, según ha explicado el secretario de la D. O., Antonio Izquierdo.

La idea de este mapa es lograr "la cosecha más homogénea y de mayor calidad posible" y culminará un proyecto que comenzó hace cuatro años, con el fin de realizar "la planificación aérea del mapa del Condado de Huelva", que servirá, entre otras cosas, para "calificar los distintos tipos de terrenos y saber cuáles son sus necesidades".

Una vez realizado el mapa, se seleccionará una serie de parcelas, en las que se colocarán unos aparatos "que controlarán la viña, y serán testadas para que nos manden información de cómo están, así como de las necesidades que puedan tener", ha indicado Izquierdo.

La zona vitinícola de la D. O. abarca una amplia comarca, que limita al norte con el Andévalo, al sur con el océano Atlántico, al este con las provincias de Cádiz y Sevilla y al oeste con la capital onubense. La superficie protegida es de aproximadamente 6.000 hectáreas, con una producción media de 40 millones de kilos de uva, equivalente a unos 320.000 hectolitro de mosto, con unos 3.100 viticultores asociados. El pasado año, la vendimia arrojó un grado medio de 10,5 Baumé, un Ph de 3,20 y una acidez total de 5,55 expresada en tartárico.