Ya han comenzado los trabajos de restauración en el templo parroquial San Juan Bautista. Los trabajos consisten en la necesaria limpieza de la techumbre, poblada de las cigüeñas por toda una legión de palomas. Nidos, plumas, nutridas matas de hierba y excrecencias conforman la cara oculta a la vista del magnífico edificio parroquial que constituye el eje físico y espiritual de La Palma.

A esto hay que añadir, el desgaste y la erosión propia de una superficie expuesta continuamente a la intemperie las lluvias, los vientos, el calor y el frío, hacen durante todo el año un paciente trabajo de deterioro.

Las labores de restauración han comenzado por la linterna pequeña, es decir, la cubierta de la capilla del Sagrario. En esta zona se venían detectando filtraciones de agua, así pues, estando además en época de lluvia se antojaba imprescindible atajar ese problema. Posteriormente, el mismo proceso de limpieza y restauración se llevará a cabo por toda la cubierta del templo y en algunas zonas puntuales del interior.

El presupuesto necesario para afrontar la primera fase de este ambicioso proyecto es de unos 34.000 euros.