Caleidoscopio

Vicente Quiroga

Los sitios del agua

Si Aracena es una localidad de nuestra hermosa sierra que siempre gusta visitar, desde hoy lo será mucho más. Una buena decisión va a permitir que a partir de hoy la ilustre villa serrana cuente con una exposición permanente del pintor onubense José María Franco. La obra donada por el artista a la villa en la que decidió acogerse como vecino hace ya muchos años, que tiene como protagonista singular el agua, constituirá una muestra permanente en la sala de exposiciones del Teatro Sierra de Aracena. Su conocida y aplaudida serie titulada 'Los sitios del agua' (Sierra de Aracena y Picos de Aroche), se verá acompañada por otra colección no menos prestigiosa: 'Las fuentes de Sevilla'.

José María Franco, 'Onubense del año', título otorgado con todos los honores y merecimientos por los lectores de Huelva Información, ve así recompensado todo cuanto a favor de Aracena ha constituido buena parte de su trabajo y de su arte, no sólo por la labor cultural en favor de la población aracenense sino también por haber llevado consigo su nombre y su identidad cultural por cuantos lugares han conocido la calidad notable de sus pinturas. Por ello son más que justos esos actos que van a sucederse estos días en la bella localidad de nuestra serranía en homenaje al pintor, coloquios y recitales, dedicados al estudio de su obra.

Hijo del inolvidable y gran pergaminista onubense Domingo Franco y padre del prestigioso escultor Alberto Germán Franco, en su larga ejecutoria pictórica, José María ha hecho del agua seña de identidad y vivero de inspiración de su obra acuarelística, tan importante, en su trayectoria artística, conjugada siempre con otras técnicas que domina por la maestría y experiencia de su arte exquisito. Fruto de todo ello es 'Lo sitios del agua', un itinerario luminoso y de singular belleza cromática a través de las fuentes serranas, venero iridiscente que brilla en la paleta del pintor y se traslada a sus cuadros con nitidez fascinante y encantadora.

Por mi parte no tendría más que remitirme a lo que yo mismo escribía en este periódico el 14 de octubre de 2003, glosando la exposición que con ese título nos ofrecía José María en la Sala Siglo XXI del Museo Provincial y que se recoge en el catálogo de este acontecimiento: "son 30 obras ilustradas con otros tantos poemas que reproducen esos lugares de la serranía onubense donde ellos residen - me refería al pintor y al poeta Manuel Moya -, como en un cielo de vegetación exuberante, de paisajes idílicos, de horizontes interminables por los que corre el agua en la que se reflejan todos sus encantos. Felices ellos tan bellos parajes motivo indiscutible de su fácil inspiración…"

Sirva como conclusión jubilosa y de entrañable reconocimiento por mi parte, un breve y hermoso poema de Manolo Moya que ilustra - entre tantos - esta exposición: "Sólo/ vive la sombra/ en la corriente./ No el caudal/ ni el astro ni la hondura:/ sí,/ la sombra sola/ del agua en su viaje". Aracena tiene hoy un atractivo más -¡y son tantos! - para visitarla y admirar su mágica fascinación.

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