NO descubro la pólvora cuando digo que el domingo el Recre se juega más de tres puntos. Una vez más tiro de topicazo a la hora de presentar un partido en el que los onubenses se juegan mucho, lo mismo que el Deportivo.

Porque, aparte de los puntos en sí, que tienen una enorme importancia, en liza está la confirmación de la recuperación de uno u otro, o bien la vuelta a las catacumbas de uno u otro después de un atisbo de reacción.

Porque frente a frente estarán dos equipos que quieren levantar la cabeza, y de hecho ambos lo ha hecho a su manera. El Deportivo, ganando de forma consecutiva dos partidos -Valladolid en casa y Betis a domicilio-, lo que unico al empate en Riazor ante el Getafe le ha valido para sumar siete de nueve puntos posibles. El Recre, por su parte, con su triunfo en Montjuic ante el Espanyol en el debut de Manolo Zambrano como entrenador.

Queda refrendar esos logros, y sólo uno de ellos puede hacerlo. Una victoria supondría una inyección de moral increíble para aquel que la consiguiera; si es el Recre, porque se alejaría posiblemente de la zona de descensoý si es el Deportivo porque volvería a salir de esas posiciones de peligro.

Con quince partidos por delante tres puntos concretos tienen su valor, pero no lo es todo. Con quince partidos por delante también importa el estado de ánimo, y ni que decir tiene, la moral de uno u otro será bien distinta según se de un resultado u otro. Y a estas alturas de la Liga lo que interesa, además de los puntos, es tener el equipo lo más entero posible.