Antonio Mancheño

Los intelectuales del órgano

Que a nadie se le ocurra pensar lo que no debe. Ni se trata del 'cantimpalo' sexual, ni del fiel 'instrumento' de tecla y fuelle, catedralicio. Me refiero a lo orgánico, como desplazamiento del "órgano político", disciplinado y carroñero, en las duras campañas de vendimiar el voto.

Uno aquí, en un rincón de Andalucía, que es lonja principal del mar de las Américas y adelantada del 'mojarreo' huelvano, se queda patitieso cuando los intelectuales, culturetas, artistas y demás gentes de 'buen vivir', se apuntan al 'sorbete de rosas' y al pan del 'manifiesto', por la 'alegría' y olé de ZP and Chaves, bailando a dúo la inquina derechosa desde la partitura que azafranan los "intelectuales orgánicos", vulgo, clientelistas del 'party' o empalmados al canon digital y sus liturgias.

Por lo visto y leído el Psoe, tiene sus orgánicos vates -poetas, sus míticos cantautores, sus toreros sin capa, sus flamencos sin alas, sus radiofónicos inspiradores y sus clericalistas militantes. Aquí mismo, Onuba City, han hecho un aquelarre de exotismo creciente para mostrarnos su entrega partidista, su iluminada vocación. Arte puro.

Me pregunto en voz alta, quien otorga el carné para ser investido como intelectual. Seguro, debe haber alguna Facultad de Ciencias Pardas y Chistorras Artísticas, que las expide. Me pregunto, si los fecundos 'plataformistas de la paz' estan dando por bueno con su firma los vertidos del New Flame, el pozo negro de los 'quinientos mil parados' andaluces, el 'fracaso escolar' que sonroja en Europa y conduce al suspenso emblemático de la Comunidad mas socialista, los profusos escándalos urbanísticos, maletines, facturas, tráfico de influencias y empresas participadas por las 'Cajas' afines, cuyo saldo deviene en un cerocerismo ético y engorde postinero de luengas arcas del partidazo 'obrero'. Me pregunto su quienes se postulan como conciencia cultural de la elite, prestan su aquiesciencia a quien y quienes desde su presidencia, cegaron los lejanos 'incendios' que arrasaron Guadalajara y Huelva, acallando las voces de dieciséis personas, desaparecidas. Me pregunto, si los socios de ésta tertulia áulica, comulgan con esa prepotencia oficial, casi obsesiva, del no ser andaluz, porque Chaves se niega a convocar al pueblo lejos de aquel paraguas que recubre la imagen 'centralista', lejos de otras Comunidades Históricas.

Me pregunto, si éste lúdico vivero de artistas se suman a quienes perpetúan la incomunicación de Huelva y Cádiz, sin que una nota de estupor inunde, el duro rostro.

Me pregunto, si en éste conciliabulo de progres sindicados, alguien pregunta, a donde ha ido a parar la 'deuda histórica' con Andalucía. Esa, que en otra hora, deparó tan buena demagogia al presidente Chaves contra el PP. Me pregunto, por qué estas luminarias vanguardistas, guardan silencio ante el agravio 'presidencial' de conceder a Córdoba la Capitalidad Cultural en 2016, mientras Huelva, celebra el fúnebre trienio del nobel Juan Ramón.

Y me pregunto, que hacen ahora los "intelectuales inorgánicos", si jugar a la taba con Góngora o verse una película de Kucor. Siguen obsolescentes mirándose el ombligo y contemplando el tiqui-taca nacional.

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