Las dos orillas

José Joaquín León

El fútbol no tiene memoria

ESOS que elogian ahora a Luis Aragonés son los mismos que le pedían que dimitiera después del último Mundial. Esos que alaban sus planteamientos y su apuesta por el fútbol de calidad son los mismos que le echaban a la gente encima para que convocara a Raúl cada vez que España jugaba un amistoso. ¿O es que ya no os acordáis del numerito que le montaron en Málaga, en el amistoso contra Francia? Esos que ahora lamentan la despedida de Luis Aragonés son los mismos que llevaron a Fernando Hierro a la Federación con el objetivo de nombrar a un nuevo seleccionador tras la Eurocopa. Y el elegido es Vicente Del Bosque, un técnico bien visto por una parte del vestuario del Real Madrid (o sea por Raúl), el mismo que fracasó en Turquía con el Besiktas y hundió al Cádiz de Baldasano con las dos manos de sus fichajes.

Luis Aragonés ha alcanzado su verdadera sabiduría en esta Eurocopa. Así hemos visto a un equipo con buen rollito y mejor fútbol. En este país que desprecia el talento y la experiencia, donde algunos se ven obligados a prejubilarse a los 52 años, este hombre de 69 años, el técnico más viejo de la Eurocopa, ha demostrado que ser sabio de Hortaleza o de donde sea obliga a la fidelidad a uno mismo, y hacer lo que hay que hacer, no lo que otros quieren que se haga. Esa independencia tiene un precio: aunque haya triunfado se irá a su casa. O a Turquía con el Fenerbahçe. Como dice el propio Luis: "Hay cero posibilidades de seguir, porque no hicieron nada para que siguiera".

Pero tranquilos, que lo mejor está por venir, según ZP. Así como algunos chuflas que hoy alaban a Luis Aragonés hace un mes lo ponían a parir, en esta Eurocopa se ha conseguido algo fundamental: Zapatero ya no es gafe. El presidente lo dejó muy claro ayer en Copenhague: "Yo no soy gafe. Sólo he estado en dos finales, la de la Liga de Campeones de 2006, que ganó el Barça, y ésta de Viena, que ha ganado España". Pero se olvidó de la final del Eurobásket de Madrid, el único partido de esa competición al que asistió, en el que se salió el último tiro de Pau Gasol y España perdió con Rusia.

Zapatero no es gafe, la verdad. ¿Cómo va a serlo, si ha ganado dos elecciones? El gafe será Rajoy, que las ha perdido. Y además un gafe se contrarresta con un talismán. Allí estaban los Reyes y la infanta Elena, tres talismanes. Zapatero asume el triunfo como propio: "Soy el primer presidente democrático con el que se gana la Eurocopa de fútbol". Hemos ganado gracias a él, igual que hace 44 años vencimos gracias a Franco, que dijo lo mismo. El fútbol no tiene memoria histórica, sólo nos acordamos del último domingo.

Como afirmó Zapatero en El País, incluso es opinable que haya crisis. ¡Anda que no le ha venido bien a éste ganar la Eurocopa!

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