Y fue 18 de diciembre. Y fue 23 del mismo mes. Y Huelva se quedó esperando a cantar el Cumpleaños feliz al Recre. Muchos onubenses hemos soñado estos días, en los que el Decano llegó a los 125 años, con números actos de celebración. Tantos como corazones albiazules existen. Los recreativistas esperaron este 2014 con expectación, pero comerán las uvas con decepción. Todo pasó para no pasar casi nada.

Sin embargo, y he ahí la grandeza del Recre, aún atesoramos el gran título que nadie nunca podrá ostentar. Y podremos celebrarlo cuando, donde y como queramos. ¿Y por qué no en el 2015? Sería otra oportunidad para engalanar el estadio Colombino, de ondear de verdad la bandera azul y blanca, de presentar dos o tres actos con sentido y magia, de abrir las puertas del club al recreativismo, de hacer partícipe a la ciudad de los festejos y de creernos nuestra historia, que es la historia auténtica del fútbol.

Creo en la crítica constructiva y en las segundas oportunidades. Y creo que es el momento de que, en aprietos económicos y deportivos, enseñemos cómo es de importante para Huelva este Recre. De 2014 me quedo con los gestos y con los detalles que gustaron a los recreativistas, que los hubo. Me quedo con el logo del 125 aniversario y su presentación, con la recuperación de los colores de la equipación y escudo original, con la inauguración del Museo del Decano, con ver al Barcelona en Trofeo Colombino, con animar a España en un partido oficial, con la canción del 125 aniversario… Y aunque a todos se les puede poner un pero, ahí están. Quizás cada año tengamos la obligación de seguir promocionando el recreativismo a la generación actual y sembrar la semilla en las venideras. 125, 126 o 127, ¡qué más da! Tenemos razones de sobra para festejar que somos el Decano. Seguro que hay gente dispuesta a aportar ideas y trabajo. Recuerden que los más grandes son siempre los más sencillos.