EL Recre despierta poco a poco de la pesadilla en el Ono Estadi. Y abre los ojos con ganas de resarcirse de la derrota sufrida allí y de la anterior en Huelva. Porque no hay que olvidar que los de Zambrano aún no han podido desahogar toda la rabia contenida desde el indignante robo ante el Madrid. A eso ahora se le suma la furia y el coraje por no poder evitar esa tortura de marcador (7-1) ante el Mallorca, y el resultado es un equipo en ebullición deseoso por lograr una bendita victoria.

Esta ansiedad por desquitarse de esas dos derrotas, que le permita además tomar un poco de aire en la clasificación, no debe jugarle en contra. El sábado más que nunca los jugadores albiazules deben saber encauzar esas ganas y deseos de agradar a su afición y de limpiar su imagen para plantar cara de manera todopoderosa al Murcia.

La motivación más grande es saber que son capaces de hacer las cosas bien. Así lo demostraron de la mano del técnico Manolo Zambrano ante el Deportivo de la Coruña, el Espanyol, el Valencia e, incluso, ante el Madrid, pese a perder.

Por eso, hay que recurrir al temple de los buenos toreros y hacer un quite a la presión y a los nervios y, de camino, al Murcia. Que el Nuevo Colombino quiere sacar pañuelos blancos pero, esta vez, no para 'cortarle la oreja' a Iturralde sino para aplaudir la buena faena de su equipo.