Nos encontramos ante una de las fechas más gloriosas de la Historia de España y más señalada para el mundo occidental: el 12 de Octubre. El paso de los años, de los vientos ideológicos, de las posturas endebles y de muchas traiciones de carácter histórico, hicieron que el encomiable día en que por nuestra provincia y por el pendón de Castilla hiciéramos nacer un Nuevo Continente, lo que en un tiempo fue día de la Raza, otro de la Hispanidad y ahora con proyección orgullosa Día de la Fiesta Nacional española, las corrientes de dentro y de fuera de nuestras fronteras, en la oscuridad de la desinformación, de la ignorancia, de la envidia de los odios políticos interesados, quieren menospreciar.

En estos días, alegres y de grandeza en que rememoramos la colosal hazaña de la Historia de nuestra patria, muchos estamentos pretenden reescribir otra vez aquella Historia que no tiene más que una sola cara y una única verdad.

En Nueva York el Día de Colón pierde fuerza, sobre todo para España. La celebración de la fecha es un mero desfile, bullanguero, donde nuestro protagonismo es eclipsado por otras naciones.

En el Central Park de Los Ángeles piden retirar la estatua del Descubridor, tachando su memoria de genocida.

En la California, que fue el más exacto reflejo de nuestro país en el habla y la forma de ser, la estatua erigida a Fray Junípero de Serra, el fraile franciscano que hizo que toda aquella zona fuera católica y que el amor a la tierra hispana creciera, ha sido violentada, cortada su cabeza y teñida de rojo el cuerpo imitando un sangriento festín vandálico.

Pero no nos asustemos de todo esto, allende los mares, en nuestro país cada día las fuerzas políticas que ahora reescriben nuestra historia presente y pasada, también quieren escribir la futura de cara a la enseñanza de la verdadera Historia de España, hoy tan zarandeada desde los colegios, las universidades y hasta el Parlamento.

Para nosotros, los onubenses, aquella hazaña marinera seguirá siendo siempre la que más orgullo arraigó en nuestros corazones, así como en la memoria histórica que no tiene más que una realidad, verdad y justicia.

La Rábida, en Palos de la Frontera, eje de unos de esos eternos lugares que vivieron y realizaron, en la valentía de sus marineros, la gran aventura del descubrimiento, mantendrá para siempre la luz de un hecho que por la voluntad de los Reyes Católicos contribuyeron a ampliar el mundo conocido con otro Mundo Nuevo.

Para quienes esgrimen a los 525 años el poder de la espada, presentemos también la fuerza eterna de la Cruz.

Hoy 12 de Octubre vivamos como españoles, unidos en la Historia y en la aventura marinera de nuestra provincia, el sentido más fuerte y alto de un honor que por mucho que quiera reescribir la Historia, siempre lo tendremos en el alma.