TIENE su salida desde la catedral de La Merced, lo que ya le da rasgos muy definidos a su personalidad. Se trata de una cofradía que saca a las calles de Huelva un patrimonio artístico de extraordinaria calidad, de los mejores del mundo cofrade onubense. En este último año, la hermandad ha mantenido su habitual ritmo de actividades de toda índole. Sin embargo, hay otro objetivo que supone un desafío para esta hermandad, aunque sin duda de que lo superará sin problemas. Consiste en el XV Encuentro de Hermandades Servitas de Andalucía que, por vez primera, se celebrará en Huelva y que traerá hasta nuestra capital a cerca de 200 cofrades de toda la comunidad. Si echamos un vistazo a su historia, hay referencias de esta hermandad en las mandas de Misas al Cristo de Jerusalén y Buen Viaje y de Nuestro Padre Jesús de las Cadenas desde el siglo XVII, así como de Nuestra Señora de los Dolores desde el siglo XVIII.

Con la autorización del prior general de los Siervos de María, se creó en 1771 la Congregación de los Siervos de María Santísima de los Dolores, cuyas reglas fueron aprobadas por el arzobispo de Sevilla, Francisco Javier Delgado y Venegas.

En 1860 fue nombrado capellán del convento de La Merced, Francisco de Paula Monís Moreno, quien logra reorganizar la Confraternidad de Nuestra Señora de los Dolores, adquiriendo un carácter penitencial para su posterior participación en las salidas procesionales de Semana Santa. La cofradía salió en la Semana Santa de 1862, ya reorganizada.

Pero el 4 de mayo de 1941, en una sesión que celebró la junta de gobierno, la hermandad acordó incorporar, asimismo, al Santo Cristo de Jerusalén y Buen Viaje como titular de la cofradía. Su primera salida procesional estaba prevista para la Semana Santa de 1944, en el paso que hasta el año anterior había llevado el Señor de las Cadenas, pero la lluvia lo impidió. También en el siglo XX, los años 60 supusieron una etapa difícil para la cofradía. En 1963 el párroco de La Merced decidió crear una comisión para reorganizar la hermandad y volver a salir en estación de penitencia, tras unos años que no lo habían llevado a cabo. Sin embargo, esas gestiones se vieron truncadas tras comprobarse el lamentable estado en el que se encontraban los pasos, que hacía inviable su salida procesional.

Sería en el Jueves Santo de 1964 cuando la cofradía volvió a salir a la calle, pero sin el Señor de las Cadenas. Tras la dimisión del hermano mayor provisional, en 1967, el párroco de La Merced se hizo cargo de la hermandad, siendo posteriormente sustituido por Manuel del Castillo Lacarra.

Estrenos

Rostrillo de hilo de plata y pañuelo de batista para la Virgen; restauración de la corona de espinas de plata del Señor de las Cadenas (1911); restauración de la corona de plata de camarín de María Santísima (s. XVIII); culminación de los faldones del paso de Cristo; restauración del corazón y siete puñales de María Santísima.

CON buenos deseos para todas las hermandades de la capital en sus salidas procesionales, se expresaba el hermano mayor de la Hermandad de La Merced o de los Judíos, Francisco Javier Lagares. Esta cofradía de la catedral está estos días en plena efervescencia de actividad. A los habituales preparativos materiales y espirituales que toda Cuaresma conlleva, este año hay que añadir la celebración, el próximo mes, del 15º Encuentro de las Hermandades Servitas de Andalucía, que se llevará a cabo el día 20 y que por vez primera se celebra en nuestra capital, siendo Judíos la responsable de su organización. Lagares indicó que se espera la asistencia de entre unas 150 y 200 personas.