Análisis

Juanma G. Anes

Como lo saco lo quemo

Lo mismo sacan al Recre bajo palio que lo llevan a la hoguera. Nada nuevo bajo el sol

Cuentan que a un político anticlerical muy relevante en nuestro país en el siglo pasado, ya fallecido, le pillaron un día emocionado, con lágrimas en los ojos, cuando salía en procesión llevando a hombros al santo patrón de su pueblo. Al contemplar esa insólita escena, sus colegas de habituales soflamas anti religiosas no dudaron en burlarse de tal estampa repleta de falta de coherencia. El sorprendido salió rápidamente al paso del desprecio de sus camaradas: "¡Eh, que lo mismo saco al santo que lo quemo en una esquina!".

Aquí, como en todos lados, que el balón entre o deje de entrar por muy poco saca a relucir las extremas ilusiones o frustraciones de gran parte del personal. Lo de Cartagena no iba a ser una excepción. Si el Decano hubiera ganado 0-3 no era de extrañar que una importante cantidad de nuevos abonados se hubiera acercado al club esta semana, previa al estreno en casa, para arrimar el hombro, como tampoco me sorprende que esos mismos dejen de sacarse el carné sólo por la derrota en Cartagonova pese a la buena reacción del equipo en la segunda mitad. Pues eso: lo mismo sacan al Recre bajo palio por un resultado a favor que lo llevan a la hoguera por uno en contra en la primera jornada de liga. Nada nuevo bajo el sol.

Es verdad que la teoría dice que hay plantilla para aspirar a hacer algo bonito, tan cierto como que vamos a llegar a septiembre sin lo de Hacienda resuelto -y sin Trofeo Colombino (¿¿??)- y eso provoca que este club siga siendo de todo menos una entidad normal. No olvidemos eso nunca o caeremos en el mismo error de hace doce meses. Ilusión sí; precaución, también. El esfuerzo de muchos, de dentro y de fuera, merece un final feliz, pero creo sinceramente que esa felicidad no consiste sólo en luchar como sea por el ascenso, sino en que este club se asiente en lo económico definitivamente, que el susto de que pudo pasar lo peor de lo peor aún sigue en el cuerpo. Sobre el verde, que sea lo que tenga que ser, y el que quiera que se suba al carro cuando más le apetezca.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios