Tras el éxito de su última exposición, Susurros al Silencio, el artista Antonio Córdoba ha decidido donar una pieza insigne de dicha muestra a distintos museos, siendo el Museo Vázquez Díaz de Nerva el primero en contar con esta obra del artista. El grabado donado y titulado Teatro de Sabrata (Libia) está realizado a la técnica del aguafuerte donde desde el leve arañazo al surco más profundo, la línea, elemento abstracto, se convierte en expresividad y sugerencia. En este grabado Antonio Córdoba ha plasmado la arquitectura rescatada del ayer con una visión contemporánea, captando el momento y dejando presente la vida pasada con sus atmósferas susurrantes que consiguen que el espectador se convierta en protagonista de la obra. Antonio Córdoba se declara un ferviente admirador del trabajo de Daniel Vázquez Díaz por cómo realiza la síntesis de la formas en sus planos siempre sugerentes, hecho que ha motivado esta donación a los fondos del museo.

-¿Cuál es su vinculación con el Museo Vázquez Díaz y por qué esta donación?

-Con el Museo Vázquez Díaz no he tenido relación hasta ahora, pero con el nombre de Daniel Vázquez Díaz sí, bueno me explico siempre me ha gustado la forma de trabajar de este artista, será en mi etapa de estudiante de la Facultad de Bellas Artes cuando crece ese vínculo. En un trabajo que realicé sobre este gran artista y desde entonces soy un gran admirador suyo, parte del motivo de la donación. La experiencia con este museo ha sido impresionante, han sido muy amables.

-¿Qué me puede decir de la obra que ha donado?

-Esta obra se realizó para mi ultima muestra, en una sala en Granada, nunca había realizado una exposición solo de grabado, si muchas colectivas de grabado e individuales de pintura, y me apetecía realizar un homenaje a mis principios como artista ya que me formé como grabador, graduándome en esta especialidad antes de licenciarme en Bellas Artes. Decidí viajar mucho durante un año por distintos rincones de España y fuera de la península. En los silencios encontraba susurros, susurros que se producían cuando me encontraba frente a cosas que me emocionaban, e intenté plasmar esos ruidos en mis grabados, capturando la vida que en aquellos silencios se hallaban. De ahí el nombre de la exposición Susurros al Silencio, esta obra Teatro de Sabrata en Libia es parte de esas memorias.

-¿En qué otros museos o pinacotecas hay obras suyas?

-Tengo colecciones en muchas entidades importantes como ayuntamientos, iglesias, centros de arte, pero destaca el Museo de Arte Contemporáneo en Segovia, los fondos de la Universidad de Granada y Facultad de Bellas Artes Alonso Cano de Granada.

-¿En qué líneas artísticas se mueve su obra en la actualidad?

-Otras veces he respondido a esta pregunta y siempre he dicho que no soy quien para decir a qué estilo pertenezco o me muevo. De eso ya se encargan las galerías, coleccionistas etc..., yo sólo puedo decir que intento plasmar mis inquietudes como mejor se. Creo que el artista debe solo de preocuparse de crear y olvidarse de lo demás, ya te encuadraran en un estilo o movimiento.

-¿Qué trabaja en la actualidad?

-Siempre hay proyectos, el principal seguir pintando día a día, viajar todo lo que pueda, porque el arte es un reflejo de la sociedad y del propio artista. Me embarqué en una aventura con arquitectura superior y quiero terminar los estudios de arquitecto y en un futuro realizar arte en el espacio.

-¿En qué momento se encuentra su obra artística?

-Más que evolucionar mi obra yo lo llamaría madurar. Creo que he madurado como persona, a través de experiencias reales haciéndome la pregunta quién soy y quién deseo ser; si la persona madura las obras de arte evolucionan.