Cultura

Riotinto recuerda la figura del doctor Ross y su labor en la medicina

Con motivo del 135 aniversario de la fundación del Club Inglés de Bella Vista en Minas de Riotinto, el historiador Carlos González Caballero (Fieldwork) pronunció una interesante ponencia sobre el doctor Ross (Hijo Adoptivo de Riotinto), jefe del Departamento Médico y director del Hospital, en Minas de Riotinto (final del siglo XIX y principios XX), como uno de los responsables de la medicina de empresa, que durante sus treinta años de permanencia en Riotinto, dio muestras de una capacidad de trabajo y calidad humana notables.

Sobre él, el doctor Teodoro de Vega Ruiz, autor del libro Presencia de la Medicina Británica en el suroeste de España, dice textualmente que "su larga permanencia entre nosotros, su dedicación, su entrega, su ilusión, y siempre su amor hacia los demás fueron reconocidos por todos, tanto a nivel particular como oficial. Está enterrado en Riotinto, en el cementerio británico de la Barriada de Bella Vista. Su lápida, lo que en ella reza, es clara y elocuente: aquí yace un trabajador que no tuvo de que avergonzarse".

Con esta frase, a modo de epitafio, terminó el conferenciante su intervención demostrando, además de conocer la historia del personaje, una gran capacidad de síntesis, pues no se extendió en datos innecesarios y destacó los valores técnicos-sanitarios, sociales, humanos y organizativos del Dr. Ross, ofreciendo a los asistentes la oportunidad de conocer algo más de esta estupenda página histórica, que supuso el paso de los ingleses en la medicina de empresa, para algunos desconocida.

El Dr. Ross tenía en su equipo de colaboradores a un joven médico de Minas de Riotinto, Jesús Chaparro Mora, (primer médico, nacido en Minas de Riotinto, con nota sobresaliente, en la Facultad de Medicina de Sevilla), en el que depositó la confianza en trabajos de investigación sobre las enfermedades víricas (paludismo, malaria...), que a principios del siglo XIX tanto preocuparon a la población y servicios médicos.

Este equipo de investigadores del Hospital de Riotinto tuvo el honor de recibir la visita del Premio Nobel de Medicina, Santiago Ramón y Cajal, en 1906, interesado por los avances de estos estudios que tanto preocuparon a Ross.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios