El peso del empleo en el sector público recae en la educación y la sanidad, especialmente en Huelva, donde no hay una presencia significativa de organismos de las diferentes administraciones. Esto explica que la Junta de Andalucía acapare más de la mitad del personal empleado en la provincia. Más concretamente, los docentes no universitarios son los que representan uno de cada cuatro trabajadores públicos.

Los datos de julio de 2017 del Boletín Estadístico del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas reflejan esta realidad, aunque atenuada con el paso de los años de la crisis. En la actualidad, 7.646 de los 31.439 empleados públicos en Huelva corresponden al sector de la educación, el 24,3% del total. La cifra ha aumentado desde 2007, aunque casi se ha reducido en 300 desde que en 2012 se llegaran a tener en nómina a 7.926 personas. De hecho, en el último año aún se ha rebajado un poco más, en 21 empleos.

La sanidad es el otro gran bloque, al aportar 6.265 trabajadores. En este caso, el último año ha significado un paso adelante, con la incorporación de 342, aunque insuficiente aún para llegar a los niveles de 2007, cuando el personal sanitario llegó a 6.364.

Entre los empleos dependientes del Gobierno central, destacan las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, con 1.657 efectivos, número ligeramente superior al que se manejaba diez años atrás (1.606), pero inferior en 150 a las cifras de 2012 (1.802), que corrobora las denuncias continuas de los sindicatos por la pérdida de presencia en la provincia onubense estos últimos años.

Incluso las Fuerzas Armadas, que tenían desplegadas 499 personas, han reducido también sus destacamentos y quedado en 70; aún así, una docena más que el año anterior.

Esta configuración del sector público determina también la composición del empleo por sexos. El protagonismo de educación y sanidad han inclinado la balanza del lado femenino, por la mayor presencia de la mujer, fijada ahora, en términos generales, en el 53,7%.

Los efectos de la recesión en el personal de las administraciones ha contribuido, además, a romper la igualdad técnica de hace diez años (50,4%), y progresivamente ha ido aumentando la cuota femenina pareja a los sectores en los que mandan, que han sufrido algo menos los recortes.

Esto hace que la Administración autonómica sea en Huelva la única con mayoría de trabajadoras, frente a la del Estado, en la que los hombres casi triplican a las mujeres. Tampoco hay dudas de ese desequilibrio masculino tradicional en los datos de las administraciones locales y en las universidades.