Huelva

El sector turístico teme el efecto negativo del fuego a largo plazo

  • Los hoteleros ven "simbólicas" las pérdidas que haya podido haber por el fuego

  • El jueves se reúnen para valorar la situación de los afectados

A corto plazo no se esperan efectos negativos en el turismo. Los hoteleros confían en que las reservas sigan la buena evolución que han dejado hasta ahora y que la normalidad "vuelva en las próximas horas". Lo que sí preocupa es el posible impacto que pueda tener en el destino la calcinación de los parajes naturales que son precisamente la seña de identidad de Huelva y más aún cuando las llamas se han acercado al Parque Natural de Doñana con lo que ello conlleva y deja de impacto mediático. A pesar de ello "aún están por ver y estamos a tiempo de poder llevar a cabo medidas que reconduzcan" los efectos de la deforestación que se extiende a lo largo de 25 kilómetros de línea de Costa en los que las llamas han dejado, en mayor o menor medida, sus secuelas demoledoras.

En eso se piensa ya desde el Patronato de Turismo, que "en breve" se pondrá de acuerdo con el sector empresarial para llevar a cabo una campaña de promoción específica que "evite el impacto negativo", según avanzó a Huelva Información el gerente del Patronato Provincial de Turismo, Jordi Martí.

Los empresarios turísticos realizaban ayer las primeras visitas a la zona más afectada y se centraban en los efectos naturales. Fundamentalmente, en la zona de la Cuesta Maneli, donde la imagen "es desoladora". Allí, el negro carbonizado resalta sobre el azul del agua que aparece al fondo del paisaje que durante meses va a convivir con los veraneantes. De momento, la poca infraestructura que hay también ha quedado afectada, fundamentalmente en las pasarelas de acceso, de las que únicamente han quedado al aire las estructuras metálicas que las aguantaban.

Entretanto, se calcula, aunque con la precaución necesaria en estos casos y antes de que se haya realizado un recuento detallado, que los efectos en la infraestructura hotelera han sido "mínimos". De hecho, ayer funcionaban "con normalidad" todos los hoteles de la zona a excepción del Parador de Mazagón, que fue uno de los primeros establecimientos que se desalojó en la madrugada del sábvado al domingo, y que se prevé que "mañana mismo" (por hoy) pueda operar sin problemas, según el secretario general del Círculo Empresarial de Turismo, Rafael Barba.

Los mayores destrozos se han quedado en el Camping Doñana, aunque "aún es pronto para poder valorar y miramos con cierto optimismo porque hay zonas que no han quedado afectadas".

Tras la alarma de las primeras horas del domingo, ayer se logró dar la vuelta a una situación que el día anterior fue "muy complicada". Fundamentalmente por los cierres que se realizaron en las carreteras de Matalascañas (A-483) y la que une ese municipio con Mazagón (A-494). Llegaron a una hora en la que muchos clientes de los diferentes hoteles de la zona ya habían salido hacia la playa para agotar las últimas horas de sus días de descanso, o estaban a punto de regresar a sus lugares de origen. Y eso obligó a que se dieran la vuelta. "Ahí fue donde se vio lo mejor de estas situaciones de emergencia: la solidaridad y entrega absoluta de todos". Desde los empleados hasta los vecinos. En el primer caso, los trabajadores de varios hoteles se vieron obligados a doblar turnos porque el cierre de la carretera impedía que sus relevos pudieran llegar a tiempo. Además, los hoteles, algunos de ellos rozando el lleno absoluto, se volcaron para habilitar camas a quienes no parecía que iban a poder realizar el camino de vuelta. Finalmente no hicieron falta porque el Plan Infoca abrió las carreteras, pero lo que sí se habilitó de forma totalmente desinteresada fueron habitaciones para mayores y niños que necesitaban un lugar tranquilo donde descansar. Por ello, se llegó a pasar de atender a unas 3.000 personas (la capacidad hotelera de Matalascañas) a ocuparse de alrededor de 5.000 en algunos momentos del día.

Esa solidaridad fue la que "inundó los hoteles y establecimientos durante toda la jornada". A más de mil personas se les facilitó comida y bebida desde diferentes alojamientos, que se pusieron a disposición de los efectivos del Plan Infoca para lo que hicieran falta.

Los empresarios se reunirán mañana para analizar con detalle los efectos que ha tenido el incendio y su posible valoración económica.

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