Después de la locura y la diversión carnavaleras, los que han seguido esta fiesta cambiaron anoche el colorido y los brillantes de la última semana por el negro, con lo que todos los presentes adoptaron la personalidad de las típicas viudas para despedir al Carnaval 2008, que finalizó oficialmente anoche con la quema del choco. Así, los onubenses tendrán que esperar todo un año para que la ciudad vuelva a llenarse de serpentinas y papelillos carnavaleros.

Como cada año, el lugar elegido fue la Plaza Paco Toronjo de la capital, al que comenzaron a llegar las viudas algo pasadas las diez de la noche. El color negro, para despedir a la 'fiesta de la alegría' pronto inundó el lugar aunque, resistiéndose a dejar atrás el espíritu del carnaval, algunas se atrevieron con escuetas pinceladas de color perdidas por el oscuro atuendo.

Así, minutos después de las once de la noche llegó el momento. Todos los presentes asistieron "con tristeza" tal y como comentaban entre ellos, a la tradicional quema del choco, un acto que puso fin a más de dos semanas de fiesta y colorido. Mientras el gran cefalópodo ardía sin remedio, las viudas recordaban algunos de los momentos vividos durante el carnaval de este año, esperando a que el que viene sea mejor que el que ya pasó. "Nos encanta el carnaval porque nos gusta todo lo que hay a su alrededor, fiesta, reuniones de amigos y alegría". Con estas palabras dijeron adiós un grupo de viudas al carnaval 2008.