Los trabajadores de Nilefos, empresa ubicada en el Polo, se encargarán del mantenimiento y vigilancia de las instalaciones si el actual propietario continúa en la línea de abandono a la que actualmente las tiene sometidas.

El presidente del comité de empresa, José Pérez, explicó ayer que en la asamblea celebrada por la mañana los trabajadores decidieron dar un ultimátum de dos días al propietario, según el cual "si en dos días no se encarga de la fábrica, en lo que a vigilancia tanto de la planta como de materiales se refiere, lo haremos nosotros". Así se lo comunicarán en un escrito que enviarán hoy a la dirección. Pérez indicó que los trabajadores quieren saber cuáles son los planteamientos del actual propietario con respecto a la factoría y recordó que hace más de dos meses que la planta esta parada y se han suprimido los servicios de limpieza y vigilancia.

Los trabajadores reclaman a la dirección un plan industrial y garantías de cumplimiento de los acuerdos en caso de que la empresa se sentara a negociar el expediente de regulación temporal de empleo. Sin embargo, estos están cada vez más convencidos de que la compañía siquiera va a presentar ya el expediente.

Los miembros del comité acudieron ayer la Fiscalía de Huelva para solicitar que lleve a cabo una investigación ante las sospechas de que pudiera haber indicios de delito en la compraventa de la fábrica de Rhodia a Nilefos.

Durante el encuentro, la fiscal solicitó a los trabajadores que aporten toda la documentación que tengan al respecto. Pérez apuntó que lo harán en breve. "Hemos puesto en conocimiento de la Fiscalía lo que nosotros consideramos son irregularidades en dicho proceso y nuestra impresión de que lo que pretendió el grupo comprador desde el principio fue la descapitalización de esta fábrica", manifestó el presidente de comité de empresa.