Huelva

Ocho muertes violentas ensombrecen el balance de criminalidad del año 2016

  • Las infracciones penales aumentan un 2,3% en la provincia, en contra de la tendencia bajista andaluza y nacional, que sí refleja la capital

  • Los hurtos crecen un 3,1% y los daños un 10%

Ocho muertes violentas ensombrecen el balance de criminalidad del año 2016

Ocho muertes violentas ensombrecen el balance de criminalidad del año 2016

Huelva no ha salido bien parada en la estadística de criminalidad del pasado año. Es una de las pocas provincias españolas entre las que aumentaron las infracciones penales, superada en Andalucía sólo por Málaga. Y tiene el dudoso honor de encabezar en el país el aumento de muertes violentas: un 166,7% más que en 2015. Estos datos la alejan de la tendencia registrada en Andalucía y en España, donde las tasas de criminalidad están en plena caída.

La presentación del Balance de Criminalidad de 2016 que ofreció ayer el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, dejó como apunte positivo para Huelva el dato general en la capital, que sí tuvo el signo del comportamiento andaluz y nacional, e incluso lo mejoró: un descenso del 3,1% en delitos y faltas penales, frente al del 1,5% en la comunidad y el del 1,2% del conjunto del país.

Pero en la estadística provincial onubense, las muertes se llevan la palma al superar otros registros. No en números absolutos, en los que los 8 crímenes de Huelva se pierden entre los datos de las grandes ciudades; sí en los relativos, atendiendo a la menor población onubense. La tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes es en Huelva del 1,54, que extrapolada a la comparativa europea dada ayer por Zoido, se sitúa detrás de la de Bulgaria (1,60), el séptimo país de la UE con peor balance de criminalidad en este apartado.

Para apreciar el dato en toda su dimensión hay que tener en cuenta que España es el segundo país, detrás de Austria, con la tasa más baja (0,63). También mejores tasas que en Huelva, por ejemplo, se dan en Italia (0,78), Portugal (0,88), Reino Unido (0,95) y Francia (1,20). La media de la Unión Europea se queda en el 0,99.

Pero el aumento de la criminalidad en la provincia no se debe únicamente a ese dato de las muertes. Se sustenta, principalmente, en los incrementos que se han dado entre los delitos por daños y hurtos, y, en menor medida, en la sustracción de vehículos. Sólo cuentan a favor las estadísticas de robos con violencia e intimidación, que caen un 7,1%, y los robos con fuerza en domicilios, que también bajaron el año pasado un 6,1%, acabando estos últimos con el repunte que se dio en 2015.

El tipo de delito mayoritario fue en la provincia el de los hurtos, con un total de 5.769, que suponen un incremento del 3,1%. Pese a ello, en los últimos años se ha registrado un progresivo descenso desde que en 2012 se marcara un pico de 6.925 hurtos. Aunque durante los años de la crisis se ha dado un crecimiento considerable de este delito, las publicaciones de los balances de criminalidad del Ministerio del Interior se remonta a 2011, año en el que ya rondaba los 6.500.

También ha evolucionado a la baja el número de delitos por daños. Cinco años atrás superaba los 2.000, y en 2016 se quedó en 1.699, que, por otra parte, refleja un incremento del 10,0%, que encadena dos años de subida.

Los delitos por tráfico de drogas se estabilizan (idéntico número los dos últimos años: 136), pero hay un 2,5% más de robos de coches, hasta 365.

Es significativo que el narcotráfico es el único indicador que creció en 2016 en la capital, un 4,9%, crímenes al margen. Aunque sólo se registraron 43 infracciones. Las mayoritarias fueron las relativas a hurtos, 2.858, y daños, 721, que caen ambas un 1,0%.

Algo inferior fue el descenso de los robos con violencia (-0,6%), con un total de 157. Los robos con fuerza en domicilios siguen cayendo desde 2014 y se quedan en 125, un 21,9% menos que el año anterior. También a tener en cuenta el menor número de sustracciones de vehículos a motor, un 30,9% menos, al quedar en 76.

Los delitos y faltas penales fueron en la capital 7.034, el 35,4% del total provincial, con el punto a favor del reseñado descenso. Desde 2013, primer año en el que Interior contabilizó datos municipales, la criminalidad ha caído en la ciudad un 18,5%. En el mismo periodo, en la provincia, el descenso ha sido mucho menor: un 8,3%. Queda el dato para la reflexión.

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