Cuatro funcionarios y varios internos atendidos por inhalación de humo y cuatro funcionarios atendidos sanitariamente es el resultado de un incendio registrado el pasado sábado en la enfermería del centro penitenciario de Huelva, según informaron los sindicatos Csif y Acaip. El incendio se produjo después de que un recluso "con un amplio historial penitenciario" prendiera fuego al colchón de su celda.

Fueron los propios internos los que avisaron a los funcionarios de servicio enfermería del olor a humo, tras lo cual uno de ellos subió a la planta residencial y localizó el incendio en la celda ocupada por un recluso conflictivo, que se encontraba cumpliendo sanción de aislamiento en ese departamento.

Dada la magnitud del fuego el funcionario solicitó ayuda a sus compañeros, que "con la mayor diligencia acudieron a realizar las labores de extinción". Según el Csif, tuvieron que emplearse a fondo, ya que el interno había situado en la puerta de la celda la cama y el colchón con sus pertenencias que había prendido fuego.

Tras la extinción de las llamas y rescatar al recluso del interior de la celda, los funcionarios procedieron a evacuar la zona residencial donde se encuentran internos con limitaciones físicas y algunos de avanzad edad. Estas labores se realizaron con la colaboración de los internos auxiliares de la unidad.

El humo invadió la galería, haciéndola inhabitable, por lo que fue necesario reubicar a los internos en otra zona del departamento durante la noche.

Como consecuencia de las labores de extinción y rescate cuatro funcionarios y algunos internos tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos en las propias dependencias de la enfermería. Posteriormente, los funcionarios necesitaron asistencia sanitaria en un centro hospitalario por inhalación de humo.

La rápida actuación de los funcionario de las áreas de vigilancia y sanitarias evitó males mayores e hizo que más de una veintena de internos salvaran su vida, al ser desalojada en "un tiempo récord el ala de hombre del módulo de enfermería".

El Csif denuncia que tras los recortes presupuestarios llevados a cabo por la Administración ha dejado la colectivo sin cursos de formación, tales como el de extinción de incendios, lo que les condiciona a la hora de atender estas situaciones que pueden revertir en consecuencias irreparables. Sin embargo, "la profesionalidad y rapidez con que actuaron los funcionarios ha permitido que la situación se resolviera sin mayores consecuencias".

Acaip ha destacado "la magnífica" actuación de los funcionarios a pesar de la falta de equipos de respiración autónoma en el centro penitenciario, incluido el propio módulo de enfermería, así como de una "casi inexistente" formación de prevención de extinción de incendios de los funcionarios.

El sindicato denuncia que la política de extinción de incendio de la Administración penitenciara "pone en riesgo la vida de los funcionarios y la de los reclusos de la prisión" y asegura que "necesita una urgente actualización de los medios de protección, ya sea equipos de respiración autónoma suficientes, chalecos de protección acorde con el trabajo que desarrolla o equipos auxiliares de oxígeno para los afectados por la inhalación de humos tóxicos en un incendio".

El incidente es, según el sindicato, una muestra más de la "poca o nula consideración que tiene la Administración al colectivo de funcionarios a pesar de que demuestran su profesionalidad como en esta última acción, sino también por desempeñar un papel primordial para que la población reclusa vuelva a la sociedad en las mejores condiciones posibles para su integración en la misma.

Todo lo ocurrido, "avala" las movilizaciones que desde Acaip se están realizado, pidiendo la dimisión del secretario general de Instituciones Penitenciarias, al no considerarlo un interlocutor válido para resolver los problemas que sufre el colectivo como por ejemplo no tener un protocolo efectivo contra las agresiones y la obtención de una mayor protección jurídica.