Huelva

La fiesta se vive en Nochevieja sin que haya grandes incidentes

  • La Policía Local desaloja la Plaza de la Merced lo que obliga a los jóvenes a trasladarse al puerto para realizar el botellón

La tradicional alegría de la festividad y una jornada tranquila han sido las dos notas predominantes en las primeras horas de este 2018 en Huelva. Desde un punto de vista de las condiciones atmosféricas, el tiempo no pudo ser mejor para las alturas en que estamos, es decir, inicio del invierno. Según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) la temperatura mínima en la capital fue de 10 ºC, es decir, una situación muy llevadera sobre todo para los que optan por permanecer casi toda la noche en la intemperie, que es la alternativa más seguida por los más jóvenes. Quienes eligieron irse a otros sitios de la provincia se encontraron con circunstancias parecidas ya que incluso en la fría Sierra, la mínima en Aracena no bajó de los 8 ºC.

Respecto al primer día de 2018, la tónica siguió siendo la misma pues la máxima que se alcanzó en la capital fue de 18 ºC. La jornada resultó idónea para aquellos que prefieren una Nochevieja más tranquila y buscan la serenidad de un paseo por una ciudad casi fantasmagórica.

81Asistencias. Son las efectuadas por Emergencias 112. Son menos que el año pasado

Por lo que se refiere a incidencias, desde el servicio de Emergencias 112 notificó 81 en toda la provincia. La cifra supone un descenso respecto al año anterior en el que se registraron 86. Esa cifra de casos corresponde al tramo horario comprendido entre las 15:00 del día 31 y las 8:00 de ayer. Las incidencias más frecuentes entre los onubenses durante esta segunda gran fiesta de la Navidad han sido las asistencias sanitarias con 35 emergencias y los avisos relacionados con la seguridad ciudadana con 24. El resto de actuaciones coordinadas por el sistema de emergencias andaluz se repartieron entre incidencias de tráfico, accidentes de circulación, incendios o anomalías en servicios básicos. Por franjas horarias, el mayor pico de actividad se alcanzó durante la medianoche, entre las 00:00 y la 1:00.

Pasan los años y hay cosas que Huelva mantiene como una costumbre imperecedera. Una de ellas es el recibir el nuevo año con esos castillos de cohetes y fuegos artificiales que gran parte de los hogares lanzan llenos de buenos deseos y con el anhelo de que todas las aspiraciones se cumplan en los próximos 365 días. Son unos minutos que dan continuidad a los intensos momentos que se viven en los hogares y que corresponden a las campanadas, seguidas a través del canal televisivo de la predilección de cada uno, y la toma de uvas. El cielo onubense se llena de luz en un espectáculo que nadie se quiere perder y que es seguido desde todas las terrazas y los balcones en una noche de casi luna llena.

La noche en las calles se desarrolló sin sobresaltos aunque en algunos casos esa tranquilidad se pudo confundir con desgana lo que desde luego, estaba muy lejos de las intenciones de los onubenses. Esto viene a cuento como consecuencia de la decisión de que la Plaza de la Merced, que es un tradicional punto de encuentro de la juventud en esa noche, fue desalojada por la Policía Local que envió a los chavales a la desangelada zona del puerto aunque los bares sí permanecieron lógicamente, en activo. Mientras, la Gran Vía que está enormemente concurrida durante toda la Navidad mantenía un aspecto fantasmagórico pese al magnífico alumbrado que luce este año.

El esplendoroso primer día de este nuevo 2018 fue una invitación para que los más osados incluso se dieran un primer baño en zonas de El Portil o Punta Umbría.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios