Tres amigos. Tres emprendedores. Tres onubenses. Un especialista en Ciencias Ambientales, un veterinario y un técnico de laboratorio. Luis Santamaría, Gonzalo de la Corte y Jesús Domínguez son los partícipes de la creación de un laboratorio privado de biología molecular, Vetfitlabs. El único que existe en la provincia de Huelva. La idea es sencilla: dar servicio a los profesionales, tanto del sector animal (veterinarios) como del ámbito vegetal (ingenieros agrónomos) con el objetivo de la detección temprana de patógenos que afecten directamente a la producción, calidad y finalmente a la salud de los consumidores.

Los emprendedores se dieron cuenta de que las empresas recurrían a localizaciones que estaban fuera de la provincia (Sevilla, Córdoba, Almería, Madrid..) para realizar análisis en la detección de enfermedades, un hecho que terminó siendo una de las razones clave a la hora de decidir montar un laboratorio de biología molecular. "Al principio nos costó un poco de trabajo" por la amplitud del sector y "no lo teníamos enfocado en nada concreto e íbamos haciendo un estudio poco a poco", explica Luis Santamaría, quien señala que ahora "sabemos cuál es la demanda verdadera que se necesita tanto en la parte animal como en la vegetal". Y así, "estamos en la línea de las necesidades de la provincia donde la demanda de este tipo de trabajo es brutal" tanto que "estamos superando las expectativas que teníamos", y es que "hemos empezado de la nada y la línea ascendente que llevamos es bastante notoria", asegura Santamaría.

Los onubenses trabajan en el Parque Científico y Tecnológico de Aljaraque

Los tres amigos comenzaron a formalizar la idea en marzo de este año y ya en verano comenzaron a trabajar. El laboratorio se encuentra en el Parque Científico y Tecnológico de Huelva (PCTH) en La Raya (Aljaraque). La bazas con las que cuentan son la maquinaria que "es de última generación" y los resultados finales que los ofrecen "con una mayor precisión y en menor tiempo", entre siete y diez días, algo que "el cliente te lo agradece" porque da tiempo a revertir la situación de sus animales o cosechas. El laboratorio se encarga de decir "si hay ausencia o presencia" de una enfermedad, además de "cuántos patógenos o parásitos tiene para que lo puedan tratar". Entre las mayores demandas durante estos meses, en cuanto a la detección de patógenos, ha sido la de localizar la enfermedad equina piroplasmosis, que es una enfermedad estacional, y la búsqueda de bacterias y hongos en vegetales.

De otro modo, el laboratorio también trabaja la parte de la genética que es la "más compleja", donde todo lo relacionado con la rama "lo podemos hacer", por ejemplo sacar toda la cadena de ADN. En plantas es "donde tenemos ahora bastante demanda" para la mejora genética. Se realiza mediante marcadores, que son "un conjunto de genes en lo que tú puedes sacar por ejemplo mayor sabor, dulzura, dureza, resistencia a la sequía o potenciar la calidad", entre otras cuestiones, de modo que todas las empresas "intentan mejorar su competitividad". Un ejemplo grosso modo es la búsqueda por una parte de un marcador molecular que mejore la resistencia de una variedad de fresa a la sequía, y por otro lado un marcador específico a esta variedad de fresa que dé más dulzor al fruto. "Nosotros genéticamente se lo buscamos para que después ellos puedan hacer el cruce de una planta con otra", explica Santamaría.

Santamaría también señala que desde otra perspectiva "si tú mejoras el producto desde lo que es el vivero, mejoras la trazabilidad, y al final influye en que al consumidor le va a llegar un producto de mayor calidad y que cada vez va a ir a más", y es que "al haber mayor competencia siempre se intenta mejorar". De otro modo, en el campo animal, "estamos pendientes de que nos aprueben un estudio junto con la Universidad de Córdoba y un centro veterinario de Málaga para detectar en sangre de yegua el sexo del descendiente que tenga" para así "saberlo con antelación".

Vetfitlabs pone el acento en la competitividad de sectores protagonistas de la provincia. Ponen el acento tres amigos. Tres emprendedores. Tres onubenses.