Los comerciantes de Isla Chica sólo tienen ya un camino para mantener vivo el proyecto del centro comercial: efectuar el pago de los 15,8 millones de euros que cuesta la parcela sobre la que se construirá el edificio. Después de que el Ayuntamiento rechazase en Pleno el recurso presentado por los comerciantes contra la adjudicación de la parcela, que les ha permitido ganar casi dos meses sobre el plazo fijado para el abono del terreno, Urbanismo ha remitido al comercio una notificación en la que no se da un nuevo plazo para el pago, sino que simplemente se comunica ese rechazo.

Por lo tanto, lo único que le resta ahora a la Sociedad Promotora de Comercio y Ocio de Isla Chica es el abono del coste de la parcela. Un coste elevado para el centenar de comerciantes de la barriada que se agrupan en esta promotora, que según explica el presidente de la misma, Juan Carlos Vizcaíno, aún están "buscando financiación, no renunciamos al proyecto". Los empresarios aseguran que tienen comercializada una gran parte del centro que se quieren construir en la barriada, un proyecto que según sus cálculos supondría una inversión de casi 60 millones de euros (incluida la compra del suelo y la ejecución de las obras) y generaría más de 200 puestos de trabajo directos e indirectos en la construcción.

Sin embargo, la financiación aún no está cerrada y el plazo se agota, aunque la promotora asevera que aún no ha recibido la notificación. Cuando ésta llegue comunicando la desestimación del recurso de reposición (presentado para ganar tiempo el mismo día que cumplía el plazo para abonar los 15,8 millones de euros), los comerciantes tendrán que efectuar el mismo.

En el momento en el que el pago se realice, la promotora tendrá que sacar a concurso el proyecto y la obra del centro comercial, solicitar la licencia de obras y ejecutarla. Inicialmente los comerciantes habían establecido la apertura del centro, tres plantas sobre rasante, para diciembre de 2010. En el caso de que no abonen la cantidad estipulada, el Ayuntamiento sacaría de nuevo a concurso de la parcela, para la que ya hay un grupo empresarial interesado.