La clase política también mostró ayer sus opiniones acerca de la masiva manifestación del 15-E. El alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, indicó que "fue una manifestación numerosa, como la anterior, no sé si más o menos". Lo que al primer edil le sorprendió del 15-E es que "se hace una manifestación un mes y medio después de la anterior, es decir, escaso tiempo. Después de una manifestación se entiende que debe haber posturas de acercamiento, de comunicación", ya que "en mes y medio es imposible hacer nada, es como si se convoca otra dentro de 15 días".

El presidente de la Diputación y secretario general del PSOE de Huelva, Ignacio Caraballo, señaló que "la menor cantidad de personas que se manifestaron" es una buena prueba de "la voluntad de diálogo" y de que los ciudadanos "empiezan a entender que las cosas se están haciendo bien; se está invirtiendo en Huelva y seguimos mejorando, con los alcaldes, todo el entramado sanitario".

También insistió en que "no entiendo cómo el PP está detrás de la convocatoria, ya que es el responsable del Gobierno en comunidades autónomas donde más se ha recortado en cuestiones de salud".

Desde el PP las cosas se ven de otra manera y la valoración del 15-E es muy distinta a la de los socialistas. Los populares reclamaron a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, que "escuche de una vez por todas el clamor de la ciudadanía onubense, que ha vuelto a exigir de forma masiva una sanidad digna en la provincia".

El presidente de los populares onubenses, Manuel Andrés González, señaló que "el Gobierno andaluz y el PSOE persisten en el error al echar balones fuera y despreciar la movilización ciudadana en vez de dialogar". González exigió a Caraballo que "pida perdón" a los onubenses por "tratar de manchar la imagen de todos aquellos que, libremente, consideran que Huelva merece una sanidad mejor".

La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Huelva, Pilar Miranda, indicó que "hay muy buenos profesionales en Huelva, muy buenos médicos y personal sanitario pero necesitamos servicios, apoyo económico, necesitamos el centro de salud de Isla Chica y en los presupuestos de la Junta no se han establecido estas partidas".

El portavoz municipal de IU, Pedro Jiménez, consideró que la manifestación del domingo "fue una respuesta muy clara y contundente, con un mensaje muy claro. La Junta debe tomar nota. El Gobierno central también, debe dejar la política de recortes que está llevando a cabo y la Junta debe invertir en sanidad en esta provincia y ponernos a la altura del resto de las ciudades andaluzas".

Para el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Enrique Figueroa, "fue una reivindicación seria, formal y que creo que nuestras autoridades a nivel regional y nacional tienen que escuchar: que nuestra sanidad hay que mejorarla a la fuerza". Desde esta misma formación, su diputada autonómica Isabel Balbás, exigió al Gobierno andaluz que tome las medidas "urgentes y necesarias" para solucionar los "problemas" de la sanidad y añadió que "una vez más" los ciudadanos han salido a la calle para demandar que sea "pública, universal y de calidad".

Podemos también se pronunció acerca de la movilización del 15-E considerándola como una "enmienda a la totalidad" a la gestión de la presidenta Susana Díaz en este área. Su secretario de Comunicación en Andalucía, Pablo Pérez, reclamó al Gobierno andaluz que cese la "hostilidad" contra quienes defienden los servicios públicos y "se sienten a dialogar".

El dirigente de Podemos insistió en apostar por un modelo sanitario alternativo con participación de usuarios y profesionales.