El delegado territorial de Salud, Rafael López, rechazó ayer las acusaciones de las fuerzas sindicales de haber cortado el diálogo con ellas en los últimos meses.

El titular de la Delegación salió al paso de las críticas vertidas la semana pasada por todos los sindicatos representados en la sanidad pública que indicaban que desde la Administración se estaba aplicando un mutismo total a pesar de las mesas de negociación establecidas.

Ante todo ello, Rafael López dijo que "nuestro interés es tener un diálogo constante" e hizo referencia a las mesas abiertas para tratar distintos temas relacionados con la Atención Primaria y que "a raíz de ellas se han producido avances como el desdoble de los cupos de médicos o se han hecho contrataciones", si bien apuntó que "aún queda una en la que se deben abordar las emergencias sanitarias, que se convocó hace un mes, y a la que no se presentó ningún sindicato". Aun así, añadió que "los sindicatos poseen ya toda la información sobre los Dispositivos de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU) o los equipos móviles y cómo éstos se han distribuido". El delegado reiteró que "tanto las gerencias de los hospitales como la propia Delegación están abiertos a mantener un contacto continuo con los sindicatos".