El sindicato Acaip mostró su desaprobación después de conocerse la sentencia contra dos internos que en mayo de 2014 dieron una paliza a un funcionario de la prisión de Huelva a quien amenazaron con un cuchillo con la intención de secuestrarlo y exigir reivindicaciones al centro penitenciario. Los 10 y 7 meses que se imponen como pena entienden que "no refleja la gravedad de los hechos" según reconocieron a Huelva Información representantes sindicales.

Los hechos tuvieron lugar en uno de los módulos más conflictivos de la cárcel onubense donde, tal y como informó este diario, dos reclusos armados con un cuchillo carcelario secuestraron al funcionario que en este momento controlaba la apertura de las celdas. Uno de ellos, simuló que se encontraba mal, momento en el que le puso el cuchillo en el cuello con la intención de protagonizar un altercado en la prisión y tomar un mayor número de rehenes cuando llegaran al auxilio más funcionarios. Según informaron fuentes sindicales en su momento, los trabajadores que conocían el peligro de la situación lograron, con grave riesgo de sus vidas, arrebatar los utensilios empleados para el secuestro y reducir a los agresores. En su momento, la dirección del centro penitenciario onubense trató de quitar hierro a lo sucedido y señalaron que las amenazas se produjeron únicamente "por breves instantes".

Uno de los acusados tiene tres condenas por sendas agresiones a funcionarios públicos

Ahora se ha conocido la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 3 de Huelva que condena al principal acusado de los hechos a 10 meses de prisión y a su cómplice a 7 meses e impone a ambos una multa de 3 meses.

El fallo judicial supone según Acaip la constatación de que se "da una mayor credibilidad a las declaraciones realizadas por los acusados que a los testimonios del funcionario agredido, de aquellos que intervinieron en el incidente y a los propios internos que acudieron en auxilio del funcionario agredido", con lo que parece también haber incidido en la tesis mantenida en su momento por la dirección del centro.

El sindicato no entiende "cómo se puede graduar" de la manera que lo hace la sentencia "el delito de atentado recogido en la sentencia, ni mucho menos atenuar la pena por entender que los dos acusados actuaban en estado de arrebato u obcecación", más aún cuando la propia sentencia aduce la "cuasi obsesión que tienen ambos internos con que están siendo perseguidos sistemáticamente de forma intencionada" y cuando "el principal acusado ya ha sido condenado previamente "por 30 delitos a lo largo de su dilatada trayectoria delictiva, de los cuales tres de ellos han sido por delito de atentado contra los funcionarios públicos y otros tres por resistencia o desobediencia grave contra los mismos".

Para Acaip, "un servidor público como es un funcionario de instituciones penitenciarias, debe gozar de la mayor protección en el ejercicio de sus funciones, por lo que entendemos que las condenas debieran ser más acordes a la gravedad del hecho; si no, se puede dar la impresión de que agredir a un funcionario de prisiones sale realmente barato".

La representación del sindicato en Huelva adelantó ayer que "va a prestar la asistencia jurídica al funcionario agredido -que precisó asistencia psicológica para su recuperación- para que dicha resolución judicial sea recurrida y luchar para un mayor castigo a este tipo de hechos que llevará a obtener una mayor protección del colectivo de trabajadores de la prisión de Huelva ante este tipo de agresiones". En este sentido, quiso criticar también a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias por "negarse a contemplar la consideración de una mayor protección administrativa a todos los trabajadores de las prisiones españolas".

Uno de los patios del centro penitenciario de Huelva.