La empresa energética Cepsa ratificó su compromiso con la sostenibilidad de la industria en España tras la firma de un pacto entre la dirección de la compañía y los representantes de los trabajadores de las refinerías de Gibraltar-San Roque, La Rábida y Tenerife, así como con los representantes de las plantas químicas de Palos de la Frontera y Puente Mayorga.

El compromiso de la compañía con su actividad industrial "se ha traducido en el desarrollo de un plan a largo plazo, cimentado en las personas que conforman la compañía, la excelencia tanto en el ámbito de la seguridad como en la protección ambiental y el refuerzo del modelo de negocio integrado". Para lograrlo, este plan se basa en cuatro puntos principales, como son "mantenimiento, optimización y desarrollo de su tejido industrial; adecuación de las condiciones de trabajo en el ámbito industrial; información y seguimiento del plan; y transparencia".

El objetivo de este plan radica en "la consolidación de la capacidad de producción actual para conseguir un mayor crecimiento internacional y la ampliación a nuevos negocios". La compañía apuntó que el compromiso por el mantenimiento, optimización y desarrollo del tejido industrial "se traducirá en inversiones en materia de seguridad, mejoras de eficiencia en las unidades de refinería y petroquímica, mejoras en la valoración de la producción, mejoras en tecnología y el desarrollo de proyectos de digitalización e industria 4.0". La compañía "promoverá y apoyará el desarrollo de acciones formativas que aumenten la capacitación de sus profesionales, incidiendo en la igualdad y la gestión de la diversidad".