El municipio toledano de Illán de Vacas tiene tres habitantes censados, los mismos que en el día de hoy han constituido la mesa electoral, algo que les impedirá votar hasta las 20.00 horas cuando cierre el colegio electoral, por lo que "a las ocho menos un minuto habrá votado el 0 por ciento y a las ocho y un minuto el cien por cien" de la población, como aseguró el alcalde y vocal de la mesa, Julián Renilla. 

Por este motivo, a las 18.00 horas las urnas estaban completamente vacías, el porcentaje de participación era del cero por cien, mientras los tres componentes de la mesa dialogaban tranquilamente porque sabían que nadie iba a votar. "La mesa está conformada por tres personas que son las que aparecen en el censo de Illán de Vacas", aclaró en declaraciones a Europa Press Televisión Renilla.

El éxodo rural ha provocado una situación que los tres habitantes del municipio acogen con sentido del humor porque saben, después de acudir a la Junta Central y Provincial, que no hay solución alguna a esta paradoja electoral. "Tres personas somos los que conformamos el censo, no se puede cerrar el colegio electoral hasta las 20.00 horas, y a las 20.00 horas votamos los tres miembros de la mesa, se efectúa el escrutinio y se acabó la historia", subrayó.

Casualidad o lógica, el caso es que además los tres únicos votantes son familiares, aunque esto no quita para que ninguno de ellos conozca las preferencias políticas de cada votante. "Yo que voy a saber, yo sé lo que voy a votar, lo que no sé es lo que van a votar los demás", añadió el presidente de la mesa, Javier Bollaín. 

Mientras, los familiares acuden a visitarlos para pasar el rato, y los componentes de la mesa juegan al dominó, hacen crucigramas o están de "charleta" en la casa de Javier Renilla que también hace las veces de ayuntamiento y, en este caso, de colegio electoral. 

"Si todos los colegios electorales cierran a las 20.00 horas, nosotros también vamos a cerrar a las 20.00 horas", concluyó el presidente de la mesa.