Caso Palau

Dos empresarios acusan a CDC de lucrarse con el desvío de fondos del Palau

  • Ambos admiten que participaron en el fraude falsificando facturas pero desvinculan al ex tesorero del partido Daniel Osàcar.

Dos directivos de empresas proveedoras de CDC han reconocido este viernes ante la Audiencia de Barcelona que la formación se lucró con el desvío de fondos del Palau de la Música a través de facturas falsas, aunque han desvinculado de la trama al ex tesorero del partido Daniel Osàcar. Miguel Giménez Salinas y Juan Manuel Parra, responsables respectivamente de las empresas Altraforma e Hispart, han asegurado que participaron en el desvío de fondos del Palau de la Música a CDC a través de facturas falsas, por las que la Fiscalía les pide tres años de prisión al acusarles de un delito de falsedad documental. La declaración de los empresarios sigue la misma línea de las acusaciones a CDC de los ex responsables del Palau, Fèlix Millet, Jordi Montull y su hija Gemma, que en anteriores jornadas del juicio acusaron a la formación de financiarse ilegalmente con comisiones de la constructora Ferrovial a través de la entidad cultural. La Fiscalía sostiene que el desvío de fondos se vehiculaba a través de los pagos en metálico, los convenios que el Palau firmó con su fundación afín Trias Fargas -actual CatDEM- y la facturación falsa a través de empresas proveedoras que cargaban a la entidad los servicios que prestaban a la formación. Dos de los empresarios acusados por esos hechos han confirmado la tesis del Fiscal y han reconocido que fue la propia CDC la que les dirigía al Palau para cobrar por los servicios prestados al partido, confesión que podría traducirse en una rebaja de sus penas. Miguel Giménez Salinas, ex consejero delegado de la empresa de publicidad Altraforma, ha asegurado que entre 2006 y 2007 cargó al Palau tres facturas por un total de 190.778 euros con los conceptos falsificados, dado que en realidad correspondían a servicios que había prestado a CDC. Según el empresario, fue CDC quien les indicó que falsificaran el concepto de esas facturas y las cargaran al Palau de la Música, aunque ha dicho no recordar la identidad de su interlocutor. En la misma línea se ha manifestado Juan Manuel Parra, de la empresa Hispart, dedicada al montaje de sistemas audiovisuales, quien ha dicho que cargó al Palau trece facturas por un valor total de 824.299 euros que en realidad correspondían a servicios prestados a CDC con motivo de las elecciones generales de 2004. El acusado ha revelado que fue el ex tesorero de CDC Carles Torrent, fallecido en 2005, quien le dio esas instrucciones, pero ha insistido en que su sucesor al frente de las finanzas de la formación, Daniel Osàcar, que afronta siete años y medio de cárcel, no sabía "absolutamente nada". En la sesión de hoy han declarado también dos ex directivos de la constructora Ferrovial, quienes, como ayer hiciera el extesorero de CDC, han desmentido a Millet y Montull al negar con "rotundidad" que los millonarios patrocinios que destinaron al Palau de la Música ocultaran comisiones ilícitas para la formación nacionalista. Según la versión de los ex directivos Pedro Buenaventura y Juan Elizaga, los patrocinios que Ferrovial destinó al Palau, que ascendieron a más de 11 millones de euros entre 2001 y 2010, pretendían dar a conocer a la constructora en Cataluña asociándola a una institución de "prestigio", lo que les permitió facturar en esa comunidad 200 millones de euros, partiendo de cero. "El Palau es una entidad con un prestigio impresionante y queríamos asociarnos a su marca para introducirnos en el mercado catalán", ha dicho Juan Elizaga. Precisamente, esas obras de reforma, un proyecto que sufrió repetidos retrasos en la ejecución explican, según Buenaventura, las numerosas reuniones que mantuvo con Fèlix Millet,  citas que figuran en las agendas incautadas a los ex responsables del Palau. "Una vez se forma la liquidación ya no existe ni una reunión más", ha añadido el ex directivo, que ha reconocido haber asistido a una reunión con Millet y con el ex diputado de CDC Jaume Camps -exculpado del caso por prescripción- para pedir que el político convergente mediara en los conflictos derivados del proyecto. Ferrovial Agroman, filial del grupo Ferrovial, ha reiterado esta semana que el patrocinio al Palau de la Música siempre conllevó la celebración de los actos culturales previstos y que no recibió ningún trato de privilegio en las adjudicaciones de obras. Por otra parte, el Consorci del Palau de la Música, con el que las administraciones nutren de fondos públicos a la entidad cultural, se reunirá el próximo miércoles, día 15, a instancias del Ayuntamiento de Barcelona, que quiere revisar la estrategia jurídica para acusar a CDC por el desvío de fondos del saqueo.

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