La llegada a las costas españolas de inmigrantes irregulares en los siete primeros meses del año ha pasado de los 7.165 de 2008 a los 4.457 del presente, un 40% menos, según los datos facilitados ayer por el Ministerio del Interior. El descenso es mayor si se cuentan sólo los datos de llegadas en cayuco a Canarias, un 63,6% menos, que se compensa en parte con la recuperación por parte de las mafias de la vía del Mediterráneo, especialmente de las pateras que salen desde Argelia.

La cifra de irregulares que alcanzaron España en embarcaciones durante los siete primeros meses ha ido descendiendo desde 2006, año en el que 17.433 inmigrantes llegaron por ese método. En 2007, ya con las primeras medidas puestas en marcha, la cifra descendió hasta 7.883 y el año pasado continuó bajando hasta los 7.165.

En lo que se refiere sólo a Canarias, el descenso también ha sido progresivo. De los 13.770 que alcanzaron sus costas de enero a julio de 2006 se pasó a los 5.680 de 2007, los 4.939 de 2008 y los 1.798 de los siete primeros meses de este 2009.

Interior atribuye el descenso de la llegada de inmigración ilegal en embarcaciones a la "eficacia" de las repatriaciones y a los dispositivos de seguridad despegados en la costa atlántica, en referencia al SIVE de Canarias y a las embarcaciones de Guardia Civil y dispositivo Frontex.

Durante los meses de abril y mayo no llegó un solo subsahariano a las costas canarias, algo que no ocurría desde 1999, pero en junio, al calmarse el estado de la mar, la cifra alcanzó los 823, si bien en esta cifra hay que incluir los llegados en patera a la costa andaluza. En julio, el total de inmigrantes que alcanzaron las costas españolas fue de 797.