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arranca el nuevo curso escolar

La plantilla docente retoma el pulso

  • El curso se inicia en Andalucía con un número similar de maestros y profesores al que existía antes de los recortes

  • Los alumnos de FP superan ya a los del Bachillerato

El curso que comienza este lunes en los colegios andaluces lo hace con cifras que no se recordaban desde que la crisis impuso la austeridad en las administraciones. Los recortes dejaron congelada la plantilla docente -incluso la mermaron-, lo que provocó las críticas sindicales y de la comunidad educativa, que denunciaron cómo muchos servicios esenciales se dejaban de cubrir por la falta de profesionales. Esta tónica cambia por completo este año. Después de seis cursos, Andalucía contará con un número de maestros y profesores similar al que existía en los años previos a que se decretaran tales medidas.

Según anunció la nueva consejera de Educación, Sonia Gaya, a partir de este lunes impartirán enseñanza en los centros públicos 98.091 docentes, es decir, 2.676 profesionales más que el curso pasado. Pese a que en términos porcentuales el incremento supone menos de un 3%, lo cierto es que esta subida adquiere un gran peso significativo, al marcar un cambio de ciclo. Hay que remontarse a 2011 para encontrar una cifra similar. En aquella ocasión el número de maestros y profesores en centros públicos andaluces fue de 98.170.

A partir de entonces comenzó un declive originado por las medidas de austeridad impuestas desde el Ejecutivo de Rajoy para "racionalizar" el gasto público. La tasa de reposición cero y la dificultad de convocar oposiciones fueron mermando la plantilla. Además, en aquellos años crecía el alumnado, pues muchos de los niños que se incorporaban a los colegios habían nacido durante los últimos coletazos del boom inmobiliario. No obstante, el número de estudiantes también fue mermando en los siguientes cursos, a consecuencia de la debacle económica. El mayor crecimiento se produjo en las enseñanzas medias, los que llegaban a los institutos de Secundaria. Este curso serán 1.423.265 estudiantes los que acudan a los centros públicos, una cifra que sigue reduciéndose, pues hace justo un año lo hacían 1,7 millones. Por tanto, haciendo una ratio entre el alumnado y los docentes, en las aulas públicas andaluzas habrá 15 estudiantes por cada maestro.

Esta relación se mantiene un poco por encima de la media española, establecida en 13 alumnos por docente, aunque dentro de los niveles europeos. En Alemania es de 14 y en el Reino Unido y Francia, de 18. En Estados Unidos también es de 14. Estas cifras nada tienen que ver con las que se alcanzan en otros continentes del mundo, como África, donde todos los países tienen una media de más de 30 alumnos por maestro. Se llega, incluso, a los 80 en algunas zonas.

Si se incluyen los estudiantes de colegios públicos, concertados y privados, la cifra llega a los 1.826.592, a los que atienden 122.255 docentes en 7.007 centros. De todos ellos, el mayor grueso corresponde a los alumnos de Infantil y Primaria (914.808), seguidos de los de Secundaria (383.771). Llama la atención especialmente el cambio producido en las enseñanzas postobligatorias. Antes de la crisis, los jóvenes que cursaban el Bachillerato eran superior en número a los de la Formación Profesional. Esta tónica se ha revertido. Ahora son mayoría los de los Ciclos Formativos (123.463) que los de Bachillerato (120.593).

En Andalucía hay una ratio de 15 alumnos por maestro, similar a la media europea

Una tendencia que obedece también al nuevo perfil que requieren las empresas, que reclaman más cualidades técnicas entre sus aspirantes a ocupar un puesto de trabajo. De ahí que la oferta para esta modalidad se haya reforzado con 2.000 plazas nuevas. Se han implantado, además, cuatro nuevos títulos en oferta completa y se han modificado 27 ciclos para adaptarlos a los entornos productivos. También resulta considerable el número de alumnos de la Educación de Personas Adultas, con 163.344.

Dentro de las enseñanzas antes mencionadas, hay que destacar el auge de la FP Dual, un modelo implantado en plena crisis y que ha tenido una gran acogida por las familias andaluzas. Este curso se han matriculado en ellas 3.967 alumnos. El éxito de esta FP se debe a que, a diferencia de los ciclos formativos tradicionales, en este tipo de educación se combinan la clases teóricas y las prácticas en las empresas desde un primer momento, de ahí que 2.832 sociedades mercantiles se hayan implicado en este modelo educativo, que se oferta en 168 centros andaluces.

Este curso también se producen cambios en al FP Básica, una modalidad que introdujo la Lomce y que, en un primer momento, provocó grandes críticas por parte de maestros y padres, al entender que suponía "una vía sin salida" para los alumnos que fracasan en las enseñanzas obligatorias. La Consejería de Educación ha implantado un nuevo programa específico de Informática de Oficina, muy demandado por los jóvenes.

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