El desempleo vuelve a incrementarse por noveno mes consecutivo en Andalucía y quinto en España. La cifra total de desempleados en España asciende a 2,31 millones, de los que 541.908 personas buscan trabajo en Andalucía, un 10,5 por ciento más que en febrero de 2007. A nivel nacional, el aumento del paro se cifra en 53.400 personas, un 2,3 por ciento más respecto a enero y un 11,5 superior a la de hace un año. En concreto, durante el pasado mes 1.840 personas dirigieron cada día sus pasos a una oficina del extinto Inem para registrarse en las listas del paro.

Con los datos difundidos ayer por el Ministerio de Trabajo, se cierra la legislatura del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con 133.000 parados más. Puede afirmarse que en este capítulo el Ejecutivo ha suspendido la asignatura de política laboral, ya que el número de desempleados es el peor desde junio de 1998 y está por encima del registro con el que terminó el último mandato de Aznar. No obstante, conviene recordar que la población activa ha subido exponencialmente respecto a hace cuatro años.

En Andalucía, el ritmo de la escalada del paro fue sensiblemente inferior en febrero, con una subida del 1,6 por ciento en comparación con enero. Es decir, alrededor de 300 personas se inscribieron en las oficinas andaluzas de empleo cada día. Los datos de febrero, aun siendo malos, son ligeramente mejores que los registrados en enero. En aquel mes, el ritmo de crecimiento del paro a nivel regional se duplicó, con un promedio de 724 nuevos demandantes de empleo diarios.

Huelva fue una de las cinco provincias españolas en las que el desempleo cayó respecto al mes anterior, con una pequeña disminución del 0,7 por ciento. Las mujeres siguen siendo el colectivo más castigado por el paro en Andalucía, sumando 317.606 desempleadas frente a 224.302 parados.

Las cifras son más dramáticas si se analizan desde la perspectiva interanual. Almería, Granada, Jaén y Málaga presentaron incrementos porcentuales por encima de los dos dígitos, especialmente en el primero de los casos, donde el paro aumentó un 25,6 por ciento.

Por sectores, construcción y servicios fueron las locomotoras que impulsaron el tren del desempleo. Ambos monopolizan dos de cada tres parados en la región, una tendencia que se repite en el resto de España. El primero de ellos, que sólo computa a los trabajadores directos del sector, presentó un incremento del 36,6 por ciento respecto a febrero de 2007, mientras que servicios, sector en el que se integran los negocios inmobiliarios, acumuló un 7,43 por ciento más, con un total de 286.288 parados.

Tampoco hay que desdeñar el aumento del 34 por ciento en agricultura, aunque su peso en el cómputo regional es inferior. En comparación con enero, el incremento ascendió al 12,4 por ciento debido a la finalización de la campaña agrícola de la aceituna, que se dejó sentir con más intensidad en Jaén, donde el paro subió más de un 10 por ciento. Por su parte, la industria no pudo sustraerse a la tendencia general y sumó en un año un 4,6 por ciento más de parados.

Al menos se produjo un incremento de la afiliación de un 1,4 por ciento en Andalucía y un 1,77 por ciento en el cómputo nacional, con lo que la media de afiliación de España se situó en 19.252.125 afiliados, 334.105 más que hace doce meses. En el cómputo nacional, la contratación supuso un pequeño consuelo ante tantos datos negativos. En febrero el Inem registró un total de 1.427.302 contratos, lo que supone un ascenso del 1,3 por ciento respecto al mismo mes de 2007 y la mayor cifra registrada en este mes en la serie histórica.