El consejero delegado de Caixabank, Juan María Nin, aseguró ayer que tras la compra de Banca Cívica, que permitirá a la entidad convertirse en líder por cuota de mercado en España, no hay "apetito" para abordar otra fusión. "No tenemos ninguna otra operación sobre la mesa", afirmó el consejero delegado en un encuentro con analistas en Barcelona, convocado para dar detalles de la operación de integración que aprobaron el lunes los consejos de administración de Caixabank y Banca Cívica.

Pese a los rumores sobre el interés de la entidad catalana en pujar por Novagalicia, Nin dejó claro que la intención de la Caixabank es seguir creciendo fundamentalmente de manera orgánica. "Seguiremos analizando cómo crecer en las regiones donde estamos por debajo del objetivo que nos hemos marcado de contar con una cuota de mercado del 15%", explicó, el directivo que recalcó que "a menos que cambiemos nuestra estrategia, seguiremos creciendo de manera orgánica". No obstante, la fusión por absorción de Banca Cívica no supone un impedimento legal para que La Caixa aborde otras fusiones, dado que en el acuerdo se reserva la posibilidad de estudiar otras operaciones e incluso acometerlas.

Nin recordó que el plan estratégico de la entidad contemplaba alcanzar en 2014 una cuota de mercado en banca minorista del 15%, objetivo que ya se ha alcanzado con tres años de antelación en las zonas donde está presente Banca Cívica.

En Canarias la cuota es del 28%, en Navarra el 33% y en Andalucía el 20%, mientras que en Castilla y León está todavía en el 13%. A estas regiones se suman las otras donde Caixabank es fuerte, como Cataluña (25,5%) y Baleares (21%). Además, con esta operación se ha convertido en líder del mercado minorista en España por activos (342.000 millones), depósitos (179.000 millones) y créditos (231.000 millones).

La entidad resultante de la fusión contará con una capitalización bursátil superior a los 16.000 millones de euros, más de 14 millones de clientes y una cuota de mercado media en España en depósitos del 14,0%, en crédito a la clientela del 13,4% y del 10,5% en total de activos.

El acuerdo de integración provocó ayer una venta masiva de acciones de Banca Cívica, lo que hizo que su cotización cayera un 16,4%, hasta los 1,855 euros. Con este retroceso, las acciones de Cívica se quedan por debajo incluso de la ecuación de canje que aplicará CaixaBank para absorber a la entidad, una situación atípica que podría corregirse en los próximos días. La cotización de la entidad catalana también retrocedió un 2,43% hasta los 3,01 euros, lo que implica que al realizar un canje de cinco por ocho, se valora a Banca Cívica en 1,88 euros por acción, por encima de los 1,85 euros a los que cerró ayer en la Bolsa.