A vida o muerte. El Recreativo-Levante del domingo figura como un encuentro en el que los jugadores y el cuerpo técnico albiazules "nos jugamos la vida". Así de claro y contundente se manifestaba Manolo Zambrano.

En su primera charla con su plantel tras la derrota en La Romareda, el entrenador del conjunto onubense alentaba a los suyos a seguir dando lo máximo e incluso más en las próximas citas, evitando fallos como los del sábado. "Hemos estado hablando de los errores individuales y colectivos cometidos ante el Zaragoza, que no se pueden cometer más, nos quedan 25 días juntos y a este equipo hay que dejarlo en Primera División", explica. Y para llevar a cabo este objetivo, propone intensificar el trabajo: "Si lo que hemos hecho no nos ha servido, entonces tendremos que hacer más aún". Para afrontar esta tarea no duda en ningún momento de la implicación de los suyos al afirmar que "la plantilla entera está muy comprometida en esta situación y deseosa de salir de ella, yo meto la mano en el fuego por los 26 jugadores, ellos son perfectamente conscientes de todo lo que se juegan, de la importancia del partido del sábado y de los siguientes porque no es lo mismo jugar en Primera División que en Segunda".

No es la primera vez que el equipo hace frente a un duelo de gran importancia en el Nuevo Colombino. Al menos, así lo cree Zambrano al reconocer que "el Recre ya ha jugado en casa partidos de gran peso, lo ha hecho hace poco ante el Madrid, el Murcia, el Barcelona, entre otros, y supo jugarlos con la tensión y la concentración apropiadas -apunta- yo deseo y estoy convencido de que volverá a mostrarse igual ante el Levante".

Asimismo, Zambrano confía en la respuesta de la afición de Huelva a la vez que destaca el comportamiento de la hinchada maña en el compromiso del sábado. "En Zaragoza, donde la gente podía estar más enfadada con su equipo porque prometía objetivos ambiciosos a principio de la temporada, vimos a una afición volcada con los suyos, consciente de lo que se estaban jugando -señala- y estoy convencido de que aquí en Huelva los seguidores estarán apoyando al Recre porque son inteligentes y saben que así ayudarán a su equipo a lograr la victoria, de eso no me cabe la menor duda".

Zambrano trabajó ayer con los suyos y volverá a hacerlo hoy con la misma normalidad que en anteriores semanas. La cuestionada participación del Levante en el partido ante el Decano no entra dentro de sus esquemas. "Tengo que pensar al igual que mis jugadores que el partido se va a jugar, nosotros esperamos que se presenten para intentar cumplir nuestro objetivo, que es ganarles", dice. Al conjunto valenciano lo considera un equipo "nada indolente" sino todo lo contrario. "El Levante se juega muchísimo porque los jugadores aprovechan los encuentros que restan de la Liga como un escaparate para que otros equipos de Primera División se fijen en ellos y así puedan seguir disfrutando de esta categoría el próximo año", advierte.

La próxima jornada de Liga, Valencia y Osasuna se enfrentan en Mestalla, dos rivales directos que luchan por evitar el descenso, al igual que el Recreativo. Respecto a este encuentro, el entrenador considera que "nos favorecen enfrentamientos directos como éste porque así se perjudicaría uno si pierde o los dos si empatan y nosotros podríamos salir de la zona de descenso pero todo esto pasa porque nosotros ganemos al Levante".

El entrenador deberá asumir una jornada más con varias ausencias en su plantel, esta vez, se trata de los sancionados Beto, Marco Ruben y Edu Moya, que fueron titulares en el último partido. Las bajas por lesión aumentarán o no el número de efectivos en función de cómo evolucionen los principales perjudicados, que son Martín Cáceres y Quique Álvarez. En este sentido, el entrenador onubense lamenta que "estamos encarando el último tercio de la Liga con muchos problemas" e insiste una vez más en que "aquellos que salgan lo harán tan bien como los que no han podido jugar", concluye.