Máxima tensión en la Primera Andaluza, que este fin de semana vive su jornada 31 de las 34 programadas. Por arriba todo está prácticamente decidido y los que luchen por el ascenso serán Pinzón, Ayamonte (que ya tienen plaza fija) y probablemente Camping La Bota y Aroche; por abajo la lucha está más abierta.

El Bonares quiere dar un paso de gigante para asegurarse la permanencia, pero tendrá un complicado oponente en un Ayamonte que marcha segundo y no quiere distanciarse del Pinzón. En parecida situación se encuentra el Moguer, que necesita puntos para sellar su salvación, y los buscará en Gibraleón ante el PMD Olont.

Tharsis y Cortegana disputan un duelo en horas bajas; los mineros han perdido los cinco últimos encuentros y podrían certificar su descenso si pierden ante un Cortegana sin mucha motivación y que ha perdido cuatro de los cinco últimos partidos.

El Pinzón ha puesto la directa, quiere terminar esta fase como primero y va a la caza de su sexta victoria consecutiva; enfrente tendrá a un Cerreño que lleva tres partidos sin perder y no se juega mucho en el envite.

Los Rosales, con los deberes hechos, quiere cerrar esta temporada dando una buena imagen; como rival le toca un Cruceño que se está jugando la vida y que lleva en una buena dinámica a este tramo final de temporada.

El Rosal, tras tres derrotas, intentará levantar el ánimo ante un Bollullos que perdió sus dos últimos encuentros y que aspira a mantener la 5ª plaza, ya que la 4ª está casi imposible (a 9 puntos).

Asegurar su presencia entre los cuatro primeros es el objetivo de un Aroche que no lo tendrá fácil en Almonte. Por su parte, dos de los equipos más en forma miden sus fuerzas en Punta Umbría: Camping La Bota y Punta del Caimán, que han ganando cuatro de sus cinco últimos duelos.

Por último, el drama del descenso sobrevuela el choque entre Aljaraque y Riotinto; los locales llevan 12 jornadas sin ganar, mientras los mineros acumulan seis y afrontan su último partido fuera, ya que luego jugarán otras tres finales, pero en casa.