La permanencia está ahí, casi se puede acariciar con la punta de los dedos. Falta un último triunfo, una victoria final que la vuelva matemática, pero ayer en Murcia la salvación del Recre quedó más que encarrilada. Un gran encuentro, otra exhibición de esos héroes albiazules que honran su profesión y el escudo que defienden y tres puntos contra el líder para demostrar que este equipo va a cumplir su parte sobre el césped y que deben ser otros los que lo hagan fuera del verde. 

Alejandro Ceballos optó por Ernesto en lugar de Miguelito. Lo dejó entrever el jueves en rueda de prensa cuando advirtió de su buen trabajo durante la semana. Mario Marín en la derecha y Diego Jiménez en la izquierda fueron los dos otros cambios del técnico, que fundamentalmente apostó por la continuidad en el mismo equipo en las semanas anteriores había dado buenos resultados.  

Para arañar un punto al líder hay que hacer las cosas muy bien, rozando la perfección cuando además se le visita en su feudo por más que en las últimas semanas no se especialmente fuerte como local. El Real Murcia defendía la primera plaza, puesto clave para retornar a Segunda por cuanto que dispara las opciones de lograr el acenso. El comienzo lo dejó claro.

Mario Marín tenía ganas. Llevaba ya cuatro jornadas sin poder vestirse de corto y volvía a casa. Demasiadas cosas que demostrar y una motivación especial que dejó clara en la primera intervención que tuvo. Agarró el balón por su banda, se fue de cuantos pimentoneros le salieron al paso, cedió a Núñez y este con calidad asistió a Manu Molina para que el onubense lograse adelantar al Recre a los cinco minutos. No podía comenzar mejor para el Decano. 

Sorprendido por el golpe inesperado, el Real Murcia se revolvió con calidad y tuvo el empate casi de inmediato con un cabeza de Azkorra que golpeó en el palo derecho de Rubén Gálvez. Trató de tomar el control como le correspondía al líder en su campo, aplicándose bien el Recre en defensa y buscando el contragolpe para hacer el segundo como la acción de Rubén Mesa en el 17 que detuvo Fernando. Con los papeles claros se sintió más firme el Decano. Al Murcia se le cerraron las puertas y no encontró por donde meterle mano a los albiazules, para desesperación de los suyos. El panorama pintaba bien, aunque la escasa renta y el potencial del rival no permitían ni respiro. 

El reloj era el mejor aliado recreativista. Cada minuto que pasaba era un estímulo visitante y una carga para los locales, a los que demasiado pronto se les comenzó a notar nerviosos y precipitados. La seriedad recreativista fue determinante en esa fase para aguantar sin complicaciones al descanso. El Murcia apenas pisó la zona de peligro y la buena disposición recreativista lo mantuvo alejado y en un terreno confuso que alimentó su ansiedad.

La cabeza fue clave en la Nueva Condomina. El Real Murcia salió a muerte. El Decano sabía que buena parte de sus opciones en el partido se iban a dirimir en el primer cuarto de hora de la reanudación. Los locales cumplieron su rol apretando y forzando varios córners y colgando balones para buscar las segundas jugadas con Azkorra.

Se liberó de esa presión por primera vez en el 50 en una buena acción individual de Ernesto por la izquierda que Jesús Vázquez llegando desde atrás la envió alta. Aira vio que no le valía y movió el banquillo. Retraso a un pivote a la defensa, desmanteló el centro y metió a Carlos Álvarez para volcarse sobre el área de Rubén Gálvez. Como si lo tuviese programado el segundo del Recre a punto estuvo de llegar en ese umbral del minuto 60. Dani Molina sacó una falta lateral con mucha picardía. Vio mal colocada la barrera y se la tocó con calidad a Fernando y el cuero golpeó en el palo. A pesar de ello se replegó demasiado el Recre, cediendo metros y alimentando las opciones de su rival. Aira incidió con su última bala dando entrada a Isi por Sergio García.

Tenía todavía 25 minutos por delante el Decano. Un mundo por luchar y pelear en un partido que comenzaba a hacerse largo. De nuevo perdonó el segundo el Recre.

Atacó mucho menos pero protagonizó las acciones más claras. Un error local lo convirtió Manu Molina en una asistencia a Rubén Mesa que tocó ajustado y se encontró con una buena mano de Fernando. El Murcia se partió. De nuevo la tuvo Manu Molina en un disparo a bocajarro. El partido tenía que estar sentenciado ya, pero seguía abierto con un líder que apretó más todavía. Para contrarrestar primero entró Ale Zambrano y a falta de diez minutos lo hizo Waldo .

Sufrió, sudó, trabajó y se mereció la victoria el Recre, que en la Nueva Condomina dejó vista para sentencia su permanencia.

Ficha técnica:

Real Murcia: Fernando, José Ruiz, Pumar, Ruso, Armando, Jaume (Carlos Álvarez 55'), Moreno (Arturo 55'), Chavero, Azkorra, Sáenz y S. García.

Recreativo: Rubén Gálvez, Mario Marín, Diego Jiménez, Álvaro Moreno, Alonso, Dani Molina (Zambrano 72'), Núñez, Manu Molina, Rubén Mesa (Waldo 82'), Jesús Vázquez y Ernesto (Cristian 55').

Gol: 0-1 Manu Molina (5').

Árbitro: Mirrallés Selma (valenciano). Mostró amarilla a Sergio García (37'), Pumar (58'), por el Real Murcia; y a Jesús Vázquez (59'), Manu Molina (68'), Ale Zambrano (81'), Diego Jiménez (86') por el Recreativo. 

Incidencias: Encuentro de la jornada 35 de la liga en el grupo IV de Segunda B disputado en la Nueva Condomina de Murcia ante unos 5.000 espectadores con la presencia de una veintena de seguidores del Decano en las gradas para acompañar y animar a su equipo. Terreno de juego en perfectas condiciones y temperatura agradable para la práctica del fútbol.