Los equipos onubenses de División de Honor siguen peleando por objetivos diferentes, pero igualmente importantes. Se ha empañado la meritoria victoria del Isla Cristina ante el Estrella de San Agustín (0-2) por el desagradable incidente racista que le tocó vivir al jugador del cuadro costero Lay en Alcalá de Guadaíra. El futbolista ha recibido el apoyo de todos los estamentos del mundo del balompié, incluyendo el cierre de filas de sus compañeros, cuerpo técnico y club en torno a su persona. El combinado amarillo ya ha demostrado que su buen hacer no es cuestión de una inercia continuista con respecto a la pasada campaña, sino que se ha ganado, con pleno derecho, la posibilidad de soñar con pelear por estar la próxima temporada en Tercera División. Mañana recibe a un San Roque que llega un puesto por debajo tras una racha de cuatro encuentros sin ganar y que es mucho más fiable en casa que fuera.

Mientras que el Isla sueña a lo grande a la Olímpica solo le nacen pesadillas. Se marchó Juan Carlos Camacho y fue su segundo, Chemi López, el que asumió el mando del equipo, pero el técnico valverdeño ha decidido poner fin a su etapa en el banquillo verdiblanco porque entiende que en el vestuario hay jugadores que "mandan más" que él, todo ello con "el apoyo de la directiva". El terremoto en el Andévalo se produce con el equipo con pie y medio al borde del abismo, algo de lo que quiere beneficiarse el Atlético Algabeño de Diego Tristán este domingo.

La Palma, por su parte, vio como su magnífica racha era frenada por el colista Ciudad Jardín, aunque el malestar de los palmerinos con el arbitraje sufrido en Córdoba es notable. Para resarcirse, a los de Aurelio Santos no les queda otra que encontrar de nuevo el camino al triunfo ante un potente Pozoblanco.

El único que asume turno viajero de los representantes onubenses es el Cartaya, que plantó cara a un poderoso Xerez, pero que no pudo sumar. Los rojillos, que esta semana han incorporado al ariete Jerónimo Herrera, quieren evitar cualquier sobresalto clasificatorio en la recta final del ejercicio y la mejor manera de arrancar es ganar en El Viso.