El San Roque cerró en el Municipal lepero un gran año en el aspecto deportivo, regalándole a su afición una clara victoria sobre el Xerez B forjada en una gran segunda parte del conjunto aurinegro, después de un primer tiempo soporífero que no consiguió animar ni el penalti fallado por Cisco a los 8 minutos de juego.

El filial xerecista llegó a Lepe con la intención de no dejar jugar al San Roque, tapando con acierto las bandas locales y obligando a sus jugadores a buscar el área visitante con pelotazos largos en los que llevaban ventaja siempre los centrales del Xerez B. No obstante el San Roque pudo adelantarse en el marcador en el penalti señalado al capitán visitante por cortar con la mano un remate de chilena de Raúl. La pena máxima la lanzó Cisco a la derecha de Toni, pero éste adivinó la intención del lanzador que mandó por encima del larguero el posterior remate tras el rechace del portero.

Desde aquí hasta el final del primer periodo, los hombres de Melo y Ceballos tuvieron más tiempo el balón en su poder pero sin poder sobrepasar la ordenada defensa del cuadro jerecista. Sólo un par de detalles de Capi por la banda derecha llevaron algo de inquietud al área de Toni. Las ocasiones más claras en este periodo fueron para el Xerez B, sobre todo en una gran jugada por la izquierda de su ataque con Tete y Añón de protagonistas, con centro de este último desde la línea de fondo para que Cristian se luciera mandando a córner el remate a bocajarro de Carlos.

Los jugadores de Antonio Puche, que debutaba en el banquillo azulino, reclamaron un posible penalti en el área lepera en el 40', por un agarrón de Nerva a Tete pero el colegiado del encuentro no consideró que lo fuera.

Una jugada de Raúl en el último minuto de esta primera mitad con pase final a Cisco que el delantero aurinegro desaprovechó por entretenerse más de la cuenta en el remate, parecía el preludio de lo que estaba por llegar tras la reanudación.

Y lo que estaba por llegar fue que el San Roque volvió del descanso como un vendaval en ataque, con un juego rápido y con continuas penetraciones por banda, por donde Capi y Nerva por la derecha, y Francis y Otón por la izquierda, desbordaron una y otra vez a la defensa visitante. El primer gol local llegó en el 14' de la segunda mitad conseguido por Alex que resolvió un barullo en el área chica de Toni tras un saque de esquina, pero antes de ese gol el equipo lepero tuvo hasta cuatro ocasiones claras para abrir el marcador.

Una volea de Francis desde fuera del área que se fue fuera por poco, un espectacular remate de volea de Cisco que se coló por la escuadra de la portería visitante pero que el árbitro anuló a instancias de su juez de línea por un dudoso fuera de juego, un remate de Otón al palo y un mano a mano de Cisco con Toni a pase de Francis que mandó a córner el portero visitante, hacían presagiar que el gol del San Roque no tardaría en llegar.

Con el marcador a favor, el San Roque bajó un poco el ritmo pero siguió creando ocasiones para aumentar su renta. Raúl pudo hacer el segundo culminando una nueva jugada de Nerva y Capi por la derecha, pero entre el portero y un defensa evitaron el gol del delantero lepero que parece gafado esta temporada de cara al marco contrario.

La única ocasión clara del Xerez B en todo el segundo tiempo fue provocada por un fallo de Juanlu que dejó el balón a pies de Añón después de un fallo en el despeje. El remate del delantero jerecista lo detuvo Cristian bien colocado en el primer palo.

En los últimos minutos, un nuevo arreón del San Roque hizo subir dos nuevos goles al flamante marcador electrónico del Municipal lepero, que redondearon el triunfo aurinegro. El primero, segundo del partido, en una jugada desgraciada del capitán visitante, Enma Seli, que cedió hacia su portería cuando Toni había salido a buscar un balón sin peligro, y el último, ya en la prolongación, con un cabezazo de Ismael rematando un centro perfecto de Otón desde la izquierda.

Después del partido, la plantilla, cuerpo técnico y directiva del San Roque, con sus parejas, se fueron a celebrar su comida de Navidad en la que a buen seguro brindarían por que el año 2008 sea en lo deportivo tan exitoso como este 2007 que está a punto de concluir.