El británico Andy Murray proporcionó al torneo de Dubai la primera sorpresa al batir al primer favorito, el número uno del mundo, el suizo Roger Federer, que cayó después de dos horas de partido por 6-7 (6), 6-3 y 6-3. No ha sido fructífero el retorno del helvético a la competición. Desde el Abierto de Australia, donde sucumbió ante el serbio Nova Djokovic en semifinales, no había vuelto a entrar en acción. Mes y medio después, en Dubai, ha retornado para caer ante Murray.

Hacía justo un año que el número uno del mundo no sucumbía en la primera ronda de un torneo. Entonces fue el 5 de marzo del 2007, en Indian Wells frente al argentino Guillermo Cañas (7-5 y 6-2). En esta ocasión ha sido ante el jugador escocés, undécimo del mundo, que ya había batido a Federer en una de las dos ocasiones en las que habían coincidido, en el Masters Series de Cicninatti del 2006. Un caño antes el helvético ganó en el abierto de Bangkok.

En Dubai, Murray cimentó la victoria en su solidez y, especialmente, en las garantías que le proporcionó su saque. Federer no dispuso de un sólo punto de rotura durante el partido. Se apuntó el primer parcial, en el desempate y al británico le bastó con quebrar el del helvético una vez en cada set.

Murray, que este año ya ha conquistado los títulos de Doha y Marsella, será el rival del español Fernando Verdasco, que superó ayer al alemán Rainer Schuettler por 7-6 (7), 4-6 y 6-1.

Rafael Nadal entró en escena con un triunfo en dobles y con su compatriota Feliciano López superó la primera ronda tras batir a los sudafricanos Jeff Coteze y Wesley Moodie (6-4 y 7-6 (5)).