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Ejercicio de solvencia (3-0)

  • El Recre acreditó casi el cien por cien de efectividad en el primer tiempo, que fue cuando decidió el choque. No cerrar antes el partido dio opciones al Girona en el segundo periodo.

Fue un eficaz ejercicio de solvencia el que posibilitó que el Recre sumara su segunda victoria consecutiva, ambas en casa, y la quinta sin perder (3-0). Y todo este ante un Girona cogido con alfileres, que se sustentó exclusivamente en el hecho de que el Decano, tras marcar dos goles en el primer tiempo, volvió a tardar en sentenciar el encuentro, dejando siempre abierta una puerta a la esperanza del equipo entrenado por el 'fuego amigo' Raúl Agné.

Juan Villar, como ya pasó ante el Villarreal B hace siete días, en el último minuto, se encargó de evitar un tiempo de descuento peligroso para el Recre, mucho más desde que a falta de doce minutos se quedó con un hombre menos por la expulsión de Matamala por doble amonestación.

El Recre decidió el partido en el primer tiempo. Eso está claro. Fue un periodo en el que el Decano tiró de efectividad para superar a un Girona que, al parecer, la necesidad le cierra la espita de las ideas. Mientras que el Recre llevó la iniciativa, el peligro se cernió por el portal de Santamaría. No es que el Decano abrumara, pero suyo fue el balón, y sobre todo cuando éste quedaba a los pies de Javi Álamo algo podía pasar.

El canario fue el gran protagonista en este tiempo. Primero con su gol, después de una buena maniobra suya culminada con un fuerte disparo intencionado, que dobló las manos del meta catalán. Luego, con otra buena acción por la derecha, finiquitada con un excelente centro al corazón del área que Pablo Sánchez se encargó de mandar a la red.

Dos goles en media hora. Punto final. Aunque con el Recre en el campo nunca se sabe. Cierto que hasta la herida pudo ser mayor si un remate de cabeza de Sergi Enrich (34') no tropieza en el larguero.

Pero ahí acabó lo mejor del Recre en este periodo. Y del partido. El Girona, necesidad acucia, tomó el mando del choque, con el beneplácito de los locales, y comenzó a llegar. Benja, en dos ocasiones, rozó el gol, pero primero su disparo franco salió fuera, y luego de topó con el travesaño.

El segundo tiempo fue discreto. El Recre puede que jugara con fuego, porque se recreó demasiado en la complacencia de un marcador favorable. Dejó la iniciativa al Girona que, sin demasiado peligro eso sí, tuvo mucho más tiempo la pelota. Los albiazules se limitaron a buscar una contra que no llegó, mientras que el Girona, poco a poco, a la chita callando, cada vez encerró más al Recre en su parcela.

La salida escalonada de Juan Villar -éste en el descanso-, de Borja Granero, y ya al final por necesidad -expulsión de Matamala- de Borda no varió mucho el panorama.

El Recre se instaló en esa acomodaticia complacencia, sabedor de que si no cometía errores el Girona no iba a marcar en la vida. Un riesgo posiblemente, que pudo tomar cuerpo a raíz de la expulsión de Matamala.

Fueron minutos de dudas, pese al 2-0, ya que un solo gol, uno solo, del Girona, sería una carga de profundidad en la confianza del equipo albiazul, obligado entonces a recuperar el cuchillo para colocárselo entre los dientes para lo que fuera menester.

Incluso antes de esa expulsión el Girona acarició el gol, sobre todo en un cabezazo de Tortolero (67') que el pie de Manu de forma increíble se encargó de desviar ¡¡¡por encima del larguero!!!

Los problemas se multiplicaron para el Recre cuando Matamala encaró los vestuarios. Richy, solo ante Manu, tuvo el 2-1 a siete minutos de un final que pudo ser de infarto.

Pero al Girona se le acabó la gasolina, o el cambio de Borda por Aitor -Bonaque adelantó su posición- dio oxígeno al Recre que, con parsimonia, pero con eficacia, se quitó el corsé y presionó un poco más arriba. Fruto de esa presión fue el robo del balón, antesala del tercer gol local. El arocheno Juan Villar, como una semana atrás, de potente disparo fue el encargado de cerrar un partido que debió estar cerrado mucho antes. Menos mal que esta vez el futbolista de Aroche, con la lección aprendida, no hizo nada reprochable, y su celebración fue con el escudo y con su gente, esa que se alegraba como él con el gol que significaba la sentencia a un partido ganado, eso sí, con todo merecimiento.

Tres goles, seis puntos en dos partidos, el descenso un poquito más lejos, y todo esto a falta de una jornada para cerrar la primera vuelta. Mejores tiempos para el Recre. Por Dios, ¡que no pare la música!

Árbitro: Daniel Ocón Arráiz (colegio riojano). Sin demasiadas complicaciones.

Tarjetas: Roja Matamala, por doble amonestación (70' y 78') Amarillas Cifu (55'), Javi Álamo (69), Manolo Martínez (79'), por el Recre; Tortolero (8'), Jandro (67'), por el Girona.

Goles (1-0) 14' Javi Álamo. Buena jugada entre Aitor y Sergi Enrich por la izquierda, que acaba con el balón en la otra banda, dentro del área, donde el canario dispara y sorprende al meta Santamaría que ayuda a entrar la pelota. (2-0) 29' Pablo Sánchez. Sensacional jugada de Javi Álamo por su banda, se va hasta de cuatro jugadores, centra y el gaditano, de cabeza, remata a la red. (3-0) 89' Juan Villar. El Recre roba la pelota cuando iniciaba un ataque el Girona, y le cae a los pies al arocheno quien, sin pensárselo, dispara desde fuera del área batiendo a Santamaría.

Incidencias: Encuentro de la vigésima jornada de la Liga Adelante disputado en el estadio Nuevo Colombino. 5.816 espectadores en las gradas. Tarde algo fresca. Antes del inicio del choque se guardó un minuto de silencio en memoria del padre del coordinador de la cantera albiazul, Antonio Segovia.

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