El Barcelona goleó al Valencia en Mestalla por 0-3 en un partido en el que pasó por encima del equipo valenciano en lo futbolístico y en lo anímico y en el que impuso su ley frente a un rival plano, que navega a la deriva desde hace algún tiempo.

Para ello, al Barcelona no le hizo falta Ronaldinho, que estuvo todo el partido en el banquillo. Tampoco echó en falta a Messi, que lesionado en el minuto 41, fue sustituido -estará al menos un mes de baja-.

El Barcelona ya fue el amo y señor del encuentro a lo largo de todo el primer tiempo. El Valencia estaba a merced del equipo catalán y ya en los primeros minutos Eto,o, solo ante Cañizares, falló el gol y a continuación un cabezazo de Touré también pudo abrir el marcador. Fue en la tercera ocasión clara para el Barcelona, a los doce minutos, cuando una gran acción de Eto,o puso en el tanteador la diferencia que ya se apreciaba en el juego.

El 0-2, tras una larguísima posesión de balón de todo el Barcelona, sólo sorprendió a Cañizares, que no vio la pelota en un disparo seco, cercano y potente de Eto,o: un gol que no cambió el trámite del encuentro.

Aunque el Valencia salió un poco más entonado tras el descanso, la primera ocasión clara de gol fue también para el Barcelona en un zurdazo impresionante de Giovani, que Cañizares envió a córner. Un poco más tarde llegaría el tercer tanto, que venía sentenciar un partido que en el juego estaba decidido hace tiempo.