El español Albert Montañés conquistó la vigésima edición del Abierto de Estoril al superar en un intenso duelo al estadounidense James Blake, por 5-7, 7-6 (8-6) y 6-0, y logró su segundo título ATP.

Montañés se lleva su segundo trofeo individual del circuito profesional después de lograr el de Amersfoort (Holanda, 2008) y sucede en el trono luso al suizo Roger Federer, vencedor el pasado año.

El jugador catalán, que calificó de "increíble" su victoria, salvó dos bolas de partido -igual que hizo en los cuartos de final ante el francés Gilles Simon- y desarmó el vistoso juego del estadounidense oponiendo su combativo estilo.

"Me veía con el partido perdido, pero logré dar la vuelta", contó emocionado el tenista, de 28 años, cuya siguiente participación será el torneo de Madrid, donde, si pasa la primera ronda, se verá las caras con Rafael Nadal, número uno del mundo.

Para alcanzar la final, el español dejó en la cuneta al estadounidense Ryan Sweeting, al alemán Simon Greul, al galo Gilles Simon -primer cabeza de serie y número 8 mundial- y al chileno Paul Capdeville, la revelación del torneo.

Así, Montañés, que se embolsará unos 53.000 euros por el trofeo, engorda la lista de españoles en el palmarés de la prueba. Juan Carlos Ferrero (2001), Carlos Moyá (2000), Albert Costa (1999), Berasategui (1998), Alex Corretja (1997), Carlos Costa (1992 y 1994), Bruguera (1991) y Emilio Sánchez Vicario (1990) son los otros vencedores españoles.

En el dobles masculino, la pareja estadounidense formada por Eric Butorac y Scot Lipsky se proclamó campeona al deshacerse del checo Martin Damm y el sueco Robert Lindstedt por 6-3 y 6-2.

El cuadro femenino coronó en individuales a la belga Yanina Wickmayer, que superó a la rusa Ekaterina Makarova por (7-5 y 6-2), y en dobles a las estadounidenses Raquel Kops-Jones y Abigail Spears, quienes vencieron a la canadiense Sharon Fichman y a la húngara Katalin Marosi en tres mangas (2-6, 6-3 y 10-5).